pelo

Casi todo sobre el pelo

, 24/8/2011

El pelo se expande, se agacha, se encrespa, se llena de humedad, trata de adaptarse a otras condiciones, pero difícilmente lo logra.

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¿Qué hacer? El pelo es, como todo lo que creemos controlar, impredecible. Y si en nuestra vida diaria logramos manejarlo de la mejor manera, es posible que cuando cambiemos de clima y condiciones como la humedad o la resequedad lo afecten, se nos vuelva un poco más difícil arreglarlo y mantenerlo sano y brillante.

Aunque es generalizado el concepto de que el pelo corto es más fácil de manejar, la gran mayoría de las mujeres prefieren llevarlo largo. La primera recomendación es, de cualquier manera, cortarlo o podarlo antes de vacaciones, pues hay un punto en que cualquier cabellera, bien sea corta o larga, pide un estilo para mantenerse bonita.

Partiendo de ese paso, sigue el hacerse un tratamiento que lo nutra y lo vigorice antes de salir de viaje, de esta manera estará mejor protegido contra las inclemencias del sol y del agua.

Lograr que el pelo se mantenga moldeable y en buenas condiciones en clima caliente, por ejemplo, donde la humedad suele ser la norma, es difícil, a no ser que se cuente con mucho tiempo para dedicarle a su arreglo. Y la conclusión es que a veces ni vale la pena ir a la peluquería porque la brisa y la humedad acaban con cualquier peinado. Lo mejor es optar por peinados fáciles, que se mantengan en las mejores condiciones posibles durante un buen rato.

Para lograr un peinado natural que se adapte a todas las ocasiones y circunstancias hay que aprender a manejarlo por sí misma, y empacar en la maleta los productos e implementos necesarios para mantenerlo saludable, brillante y con forma durante las vacaciones.

Afortunadamente, los accesorios para el pelo son tan diversos como adaptables, y siempre se usará agarrarlo con bandas, diademas, hebillas y pinzas, de modo que siempre, aun para una ocasión informal, se vea natural.

En cuanto al champú y el resto de productos que se usan en el día a día, es bueno cambiarlos para las vacaciones y escoger dentro de la numerosa oferta del mercado algunas opciones que se adapten más a las condiciones climáticas del lugar donde se va a permanecer.

Si se cae, si se pinta
La caída del pelo se puede deber a varios factores, entre ellos, los cambios hormonales, el estrés y los tratamientos demasiado agresivos. Por eso, es mejor prevenir antes que lamentar, y llevarse al viaje un buen producto que evite la caída del pelo. O hacerse antes de las vacaciones algún tratamiento revitalizante que dejará el pelo en buenas condiciones para el embate del agua y el sol.

También el pelo teñido o tinturado puede jugar malas pasadas en vacaciones. Aquellas mujeres que están acostumbradas a hacerse un tratamiento de estos cada mes o cada dos meses, deben ir al mar con la seguridad de que los productos utilizados en su tintura no les van a jugar la mala pasada de hacerlas aparecer con el pelo de varios colores, deslucido y seco. Por eso es tan importante, primero, elegir productos de buena calidad para tinturar, y segundo, acompañar los tratamientos de tintura de otros anteriores o posteriores que evitan la resequedad, como acondicionadores especialmente indicados para esa finalidad.

Un consejo final de vacaciones es comprar un champú adecuado para el tipo de clima al que se viaja. Es bueno consultar al propio peluquero qué champú y acondicionador usar, según las características del pelo, al igual que las cremas anti–frizz, alisadoras, productos hidratantes, y otras yerbas.
 
Déjalo libre

Echa mano de geles y cremas que sirvan para domeñar tu pelo: si es muy rizado, alisadoras, por ejemplo.

Nunca, nunca, nunca te metas a la piscina o al mar sin mojarte el pelo con agua dulce. El pelo seco absorbe el cloro y la sal con mayor facilidad.

Busca alternativas de peinados que se adapten a las condiciones climáticas. Agarrado con una banda o hebilla, si es largo; con un gel que lo haga ver húmedo, si es corto.

Como es normal que en vacaciones se lave el pelo con mayor frecuencia, házlo con un champú más suave que el que usas normalmente.

Todo el tiempo trata de hidratar tu pelo. La lucha más generalizada durante las vacaciones es aquella contra el pelo reseco.

No te excedas en ponerte cien productos al mismo tiempo, el pelo puede quedar como un pastiche.