Control del peso

Los porqué de los kilos

Revista Fucsia, 6/12/2011

A pesar de las dietas, el ejercicio y los sacrificios no logras bajar de peso. Quieres encontrar la raíz del problema y piensas que todo lo haz hecho bien. ¿Qué sucede? Los kilos están allí (y no se van) por una razón.

Si haces ejercicio frecuentemente, comes sano, descansas y no obtienes resultados, es mejor que consultes al especialista (Foto: Thinkstock ) - Foto:

Un romance sustancioso
El amor puede hacer que uno coma más de la cuenta. El sicólogo Stephen Gullo ha encontrado en sus investigaciones que las mujeres tienen la tendencia a adoptar los hábitos alimenticios de sus parejas. Puede ser que te inclines por alimentos más saludables, pero si él tiene una bolsa de papas fritas, lo más seguro es que termines sucumbiendo a la tentación. Hay que ser fuerte y tratar de que las salidas a comer sean lo más provechosas para ti.

Excesos de fin de semana
Las personas suelen consumir durante el fin de semana entre 200 y 300 calorías más que en los otros días. Si las sumamos, contando la noche del viernes, serían entre 600 y 900 calorías más y la mayoría provienen de postres, grasas y licor. Lo ideal es convertir el fin de semana en la oportunidad para darse uno o dos gustos, pero no todos a la vez. Por ejemplo, aprovecha para tomar un buen desayuno, tipo brunch. Como regla en las cenas o eventos del fin de semana, disfruta de dos cosas que te gusten; si comes pan y postre, no tomes vino ni harinas con la comida. Si decides tomarte unos tragos, no comas postre y prefiere entradas livianas con alto contenido de proteína.

De un vicio a otro
No es casualidad que los índices de obesidad hayan aumentado a medida que la cantidad de fumadores ha disminuido. Se ha comprobado que una persona puede subir hasta 10 kilos cuando decide dejar de fumar debido a la ansiedad que le produce no acercarse a los cigarrillos. La solución no es seguir pegada del filtro. El té y los pasabocas bajos en calorías son los mejores amigos de quienes desean dejar el cigarrillo sin llenarse de libras. Los productos sin azúcar como la gelatina, o los refrescos sin calorías, ayudan bastante.

Dulces sueños
Un estudio realizado por la Universidad de Case Western concluyó que las mujeres que no duermen bien, son 32 por ciento más propensas a ganar hasta 15 kilos al cabo de 15 años (casi un kilo anual). La falta de sueño hace que el metabolismo sea más lento y se alteren los niveles hormonales. La misma investigación mostró que después de una mala noche, las personas tienden a elegir comidas menos nutritivas y con mayor contenido calórico.

Más comida, menos pepas

Una de las razones por las que la ansiedad aumenta el deseo por los dulces es que el azúcar reduce los niveles de estrés, pero el exceso en su consumo puede continuar, aun cuando haya desaparecido el síntoma.

Bebiendo ‘en forma’
No sólo alcohol, las bebidas como gaseosas, batidos, bebidas preparadas de café, té helado, bebidas alcohólicas, etc., son proveedores de una buena cantidad de calorías. Estas calorías ‘líquidas’ no satisfacen al cuerpo, lo que se si hacen es convertirse en el proceso digestivo en grasa.

Recuerda que el cuerpo necesita comer toda clase de alimentos pero también hacer ejercicio para mantener un equilibrio. Ten en cuenta que en algunas ocasiones la subida de peso puede ser producto de algo un poco más complejo; si haces ejercicio frecuentemente, comes sano y descansas y no obtienes resultados es mejor que visites al médico.