Los 5 apuestas más interesantes de Colombiamoda 2015

Fucsia.co, 30/7/2015

Explosiones de color, investigación en la producción de materiales, telas refinadas y prendas muy, muy femeninas, fueron algunos de los elementos más sobresalientes de Colombiamoda.

Foto: Inexmoda/Colombiamoda - Foto:

La editora en jefe de la Revista FUCSIA, Angélica Gallón, propone en esta entrega final los cinco elementos que más le gustaron de Colombiamoda y que le hacen pensar que la moda colombiana está en su mejor momento.

1. De lanas, telares y otros enredos

Como nunca antes en la moda colombiana, es evidente que los diseñadores han emprendido un camino no solo por la exploración formal y de siluetas, sino por una indagación juiciosa, académica o empírica con los materiales. 

Con las limitaciones en las importaciones en telas (acentuada por los precios del dólar) y con un afán de involucrar conocimientos artesanales y saberes autóctonos, los diseñadores se han atrevido a diseñar piezas emblemáticas que seducen con sus formas pero también con su materialidad. Los casos de esta tendencia fueron Andrea Landa, que le está dando una nueva dimensión al cuero, Pepa Pombo y Papel de Punto cuyos diseños parten de cero, para luego crear tramas y figuras que traducen la inspiración que alienta su colección. 

Pasarela Non Stop. Andrea Landa - Foto: Inexmoda/Colombiamoda


Pasarela Non Stop. Andrea Landa - Foto: Inexmoda/Colombiamoda

Carlo Carrizosa con sus telas excelsas hechas en telar, Jorge Duque con sus exploraciones siempre inquietantes y el uso, en esta ocasión, de cintillas de madera; y Miguel Mesa quien está liderando una inquietud maravillosa por salirse de los materiales predecibles en la moda e ir a lugares insospechados a encontrar fibras para construir vestidos.

Pasarela Jorge Duque - Foto: Inexmoda/Colombiamoda

                                         

                                                              Pasarela Fucsia 15 años. Carlo Carrizosa.  - Foto: Inexmoda/Colombiamoda

                                                         

2. Coloridas sacudidas

Algo que los expertos internacionales suelen celebrarle a la moda latina es su apuesta sin miedos por el color. Y este año en Colombiamoda fue muy interesante notar que cada vez más diseñadores se aventuran a explorarlo, no sin antes hacer un trabajo dedicado en sus talleres para definir paletas, contrastes y texturas no predecibles. 

Los diseñadores de Leal Daccarett dieron una cátedra brillante de cómo los pasteles pueden combinarse entre sí y así, amarillos, verdes, rosas pálidos, y azules comulgaron y se entrelazaron bellamente. Pepa Pombo, por su parte, hizo que esa tendencia tan actual de poner a conversar texturas complejas llenas de colores protagonizara también las pasarelas colombianas y su apuesta fue por el naranja, el verde y el morado. 

Pasarela Leal Daccarett- Foto: Inexmoda/Colombiamoda

Pasarela Pepa Pombo - Foto: Inexmoda/Colombiamoda


3. Afianzamiento de una nueva feminidad 

Lejos de esos años en los que cada pasarela parecía un discurrir de vestidos para reinas y, superada la tara de pensar que la temporada de primavera-verano solo era para presentar vestidos de baño y de gala, los diseñadores han afianzado cada vez más nuevas miradas sobre la mujer colombiana, una que está menos estereotipada y que ha comprendido que hay otros recursos más sofisticados y trastocadores para la seducción que enseñar piel y forrarse en tela. 

Hay tres diseñadores que, a mi parecer, están liderando esa nueva feminidad, y que están inventando otras maneras para que mujeres empedradas encuentren en la ropa que usan una traducción más fiel de su carácter. Johanna Ortiz, que viene desde el año pasado marcando una senda muy latina y femenina a la vez, con prendas versátiles, ligeras que parecen un halago para cualquier tipo de silueta y de cuerpo. 

Leal Daccarett, que de la mano de su musa Karen Dacarrett ha aleccionado a las mujeres citadinas sobre cómo los detalles sutiles y una apuesta constante por el refinamiento sencillo pero expresivo pueden hacer de una mujer común, una inolvidable. Finalmente, Kika Vargas, quien sin importar la imposibilidad de sus diseños, ha hecho de los volúmenes excesivos y las siluetas rectas y oversize una manera de vestir a unas mujeres que no tienen miedo de explorar y reinventarse a través de la moda.


Pasarela Johanna Ortiz- Foto: Inexmoda/Colombiamoda



Pasarela Johanna Ortiz - Foto: Inexmoda/Colombiamoda


4. Telas excelsas

La apertura y el cierre de la feria a cargo de Francesca Miranda y de Kika Vargas estuvieron marcados por un elemento común: la escogencia de telas refinadas, de buenos cuerpos y caídas, telas importadas que hablan también de una cierta prosperidad en el mundo de la moda que puede costear estos incrementos en los precios solo para hacer una mejor pieza. Estas dos diseñadoras son emblema de que hay una consumidora cada vez más entrenada, viajada y sofisticada que no está dispuesta a invertir su dinero en piezas que no le aseguren una altísima calidad. 

                                                          Pasarela Francesca Miranda - Foto: Inexmoda/Colombiamoda


Pasarela Francesca Miranda - Foto: Inexmoda/Colombiamoda


5. Zapatos, benditos zapatos

Los eternos olvidados de los desfiles, los causantes de tropiezos en pasarela o de verdaderos desaciertos estilísticos, esta vez estuvieron muy acorde con los estilos de cada pasarela y sirvieron como ecos de las inspiraciones de cada diseñador y evidencias de las mujeres que definen sus marcas. 

Los stilettos negros de Jorge Duque que parecían prender en llamas en la parte posterior, las sandalias de tacón bellas y refinadas de Carlo Carrizosa y Andrés Pachón, la sandalias planas de Johanna Ortiz y flip flops intervenidas de Kika Vargas, los zapatos de plástico de Melissa para Pepa Pombo y los botines cortos en blanco y negro para Papel de Punto hacen pensar que la moda en general camina con pasos firmes.

Pasarela Papel de Punto- Foto: Inexmoda/Colombiamoda

Pasarela Carlo Carrizosa - Foto: Inexmoda/Colombiamoda