Bienestar

Ejercicios para un mejor cerebro

Sami, 20/10/2016

Según recientes estudios sobre el efecto del ejercicio en el cerebro, la práctica de una actividad física mejora la memoria y la concentración, protege del deterioro cognitivo e, incluso, contribuye al crecimiento de nuevas células cerebrales.

Fotos: 123rf; iStock - Foto:

Son muy conocidos los beneficios que tiene el ejercicio para la salud física de las personas. Pero, además, según un estudio reciente del Departamento de Neurociencia Clínica de la Universidad de Oxford, las sesiones cortas de entrenamiento pueden llegar a ser más eficaces que algunos fármacos para impulsar la concentración y aumentar las facultades cognitivas.

El estudio arrancó con la premisa de que la actividad aeróbica es un poderoso estímulo para mejorar la salud mental y para generar cambios estructurales en el cerebro. Pero, ¿cómo actúa?, ¿qué hace? “Hay tres formas en las que el ejercicio beneficia al cerebro: primero, los niveles de atención, memoria y concentración aumentan. Segundo, la salud general y la función de los vasos sanguíneos se optimiza, lo que no solo es bueno para el cerebro; además, el ejercicio protege contra la presión sanguínea alta y la diabetes, que son malas para este órgano. Tercero, estar en forma facilita la autonomía personal que también protege contra el deterioro cognitivo”, afirma Michael Joyner, M.D., médico fisiólogo del ejercicio de la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota.

Según el especialista, el ejercicio contribuye al adecuado funcionamiento del cerebro porque puede beneficiar los vasos sanguíneos y el metabolismo, así como aumentar los niveles de algunos químicos cerebrales y ayudar al crecimiento de nuevas conexiones neuronales. Los estudios en animales –de acuerdo con la investigación– también han demostrado que el ejercicio o actividad física produce cambios muy específicos en el cerebro que son distintos de los producidos por el aprendizaje o las nuevas experiencias. De hecho, afirma, “es un potente modulador de la plasticidad de la estructura cerebral” o lo que es lo mismo, de la capacidad de las células nerviosas para regenerarse anatómica y funcionalmente.

Aunque el mismo estudio afirma que hay aún muchas preguntas sin resolver, asegura que estudios futuros pueden demostrar el potencial del ejercicio como herramienta para remediar una variedad de enfermedades debilitantes, así como para maximizar el desarrollo del potencial cognitivo o aliviar la carga del declive cognitivo asociado al envejecimiento.

La proteína clave

Hace unas semanas, investigadores de la Universidad de Nueva York sugirieron que la actividad física regular aumenta la producción de una proteína llamada “factor neurotrófico derivado del cerebro”, o FNDC, la cual ayuda a las neuronas a florecer y fortalecer las conexiones. “Es una hormona que puede estimular el crecimiento nervioso. Hay evidencia de que es secretada al ejercitar los músculos y contribuye a la creación de nuevas células cerebrales. Lo que significa que hay una conexión con el cerebro muscular”, cuenta Joyner.

Ejercicio recomendado

Según el estudio de la Universidad de Oxford, las directrices actuales para la salud y la forma física óptima recomiendan a los adultos que dediquen 30 minutos diarios

5 días a la semana, a la práctica de ejercicios de intensidad moderada, o 20 minutos diarios 3 días a la semana, a entrenamientos de mayor intensidad. También se puede hacer una combinación de ejercicio moderado e intenso. Además, se aconseja que las personas dediquen 2 o 3 días a la semana para ejercicios de resistencia especializados en cada uno de los principales grupos musculares, así como ejercicios neuromotores (equilibrio, agilidad y coordinación) y de flexibilidad.