Rostro intacto todo el día

Fucsia.co, 15/4/2014

Los fijadores se han convertido en los mejores aliados para garantizar la duración del maquillaje, minimizar las imperfecciones y darle al rostro el tan anhelado efecto porcelana.

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Son mejor conocidos como primers, prebases o, simplemente, fijadores. Estos viejos sabuesos de la cosmética ya tienen varios años de presencia en la rutina de los maquilladores profesionales. Sin embargo, hasta ahora se empiezan a colar en la práctica diaria de un número creciente de mujeres. Después de lavarse la cara y aplicarse una crema hidratante, el tercer paso es acudir a estos geles transparentes que fijan el maquillaje durante ocho o doce horas, gracias a su alto contenido de silicona y copolímeros, que actúan como una barrera protectora entre la piel y los cosméticos, hidratan el rostro y retienen el agua que normalmente se pierde con el sudor, brindando una sensación de frescura y, a la vez, controlando el brillo.

Pero no solo son los mejores aliados del maquillaje, sino también del cuidado de la piel. La protegen de la aparición de líneas y arrugas, por cuanto rellenan los poros y evitan el efecto directo que pueden tener los químicos cosméticos y la polución en el cutis. Los componentes varían de una a otra presentación, algunos incluyen vitamina C y E, extracto de té verde y antioxidantes, y muchos contienen factor de protección solar (SFP). Desde que se han convertido en un componente básico del maquillaje, sus presentaciones también varían según el área del rostro en la cual se aplican; algunos se pueden utilizar debajo o sobre el maquillaje. Junto a las llamadas prebases, hay primers, para las pestañas que aportan volumen previamente a la aplicación de la pestañina, y fijadores de labios que los suavizan y prolongan la duración del color.

El listado de beneficios de los fijadores promete seguir extendiéndose conforme aparezcan nuevas fórmulas. Pero lo más importante, según indican los expertos, es que son aprobados dermatológicamente, hipoalergénicos y no comedogénicos, es decir, que no causan granos en la piel ni agudizan el acné. No obstante sus bondades, los profesionales recomiendan no exceder su uso, y acudir a estos productos preferiblemente en ocasiones especiales porque, ante todo, lo más importante es proteger la piel, dejarla descansar, que respire.