Juan Manuel Renjifo

, 23/8/2009

Conocido por el desarrollo del suero antiofídico en Colombia, se ocupa de crear una colección de referencia de reptiles y anfibios en la Universidad del Magdalena.

ara este biólogo, el desconocimiento es el mejor estímulo: “Lo importante no es lo que yo haga para ‘salvar al planeta’, sino que me preocupa mucho la ignorancia de los colombianos con respecto a las serpientes. Esa ignorancia no es pecado, porque todos nacemos con el mismo nivel de desconocimiento acerca de las cosas y, por eso, siempre les digo a los estudiantes que éste es el mejor estímulo para aprender”.
La manera como este biólogo habla de los ofidios, sobre los que lleva más de treinta años investigando, nos convence de que nos hemos dejado inculcar un miedo ‘sordo’ a las culebras, un temor que no somos capaces de racionalizar porque no queremos aceptar que estos animales son parte de la naturaleza. Es posible que esta visión científica provenga de su padre, Santiago Renjifo, quien fue Ministro de Salud durante el gobierno de Guillermo León Valencia y se internó en la Sierra de la Macarena en la primera expedición oficial emprendida hacia esta reserva natural, a mediados de los años 40.
Renjifo trabajó durante 30 años en el Instituto Nacional de Salud (Inas), donde desarrolló el suero antiofídico, trabajo por el que es más conocido en Colombia y que ha permitido aplicar este antídoto para salvar vidas. A su salida del instituto había recopilado un importante número de ejemplares de serpientes que donó al Instituto Humboldt, colección que esa institución le donó a su vez a la Universidad del Magdalena, donde trabaja Renjifo desde hace cuatro años como profesor de Biología y conformando una colección de referencia de reptiles y anfibios, dentro del Museo de Historia Natural de esta institución.
El mejor premio a su dedicación ha sido el que su hija Camila, bióloga como él, haya obtenido una beca para estudiar en la Escuela de Medicina Tropical de la Universidad de Liverpool, donde esta bióloga de 23 años hará un doctorado en Neurotoxinas de los venenos de especies como cobras, mambas y kraits de África y Asia, y de las corales de Colombia, durante los próximos cinco años.