Deco

Un picnic con todas las de la ley

, 7/11/2013

El carácter campestre de esta celebración se expresa de manera genuina en una propuesta estilo picnic, para disfrutar en medio de la naturaleza.

- Foto:

Andrés Mora, de MY Group Epicatering, explica que “no se trata de la tradicional hacienda sino de un restaurante en La Calera, Orgánica en el Cielo, cuya especialidad es la comida orgánica. Lo dotamos de mesas y bancas rústicas, centros de mesa en cajas de madera, caminos en lugar de manteles, estuches para los cubiertos, canastos de picnic, floreros de malla de gallinero y madera rústica, frascos de conservas con detalles en cabuya, además de elementos como baldes, hieleras, cojines y mantas para sentarse en el jardín”.
La paleta de colores elegida se decantó por el blanco, el amarillo y el verde, con un toque turquesa que se refleja en las mesas. Estos tonos se repiten en las flores de los centros de mesa y las que ambientan  los diferentes espacios, todas variedades campestres que no le restan protagonismo a la naturaleza.
En los centros de mesa se usaron hortensias blancas y verdes, rosas de jardín y acentos de craspedias amarillas en bases blancas de madera. En los arreglos adicionales, tulipanes en tonos amarillos en frascos de conservas. Las paredes de bahareque se adornaron con hortensias blancas, minicalas y centauras amarillas, que reposan en frascos con malla de gallinero y madera rústica. Una puerta antigua fue revestida de hortensias jumbo verdes, en frascos de conserva, y la entrada al lugar se enmarcó con hortensias blancas, girasoles amarillos y Million Stars en diferentes tipos de canastos. Las bancas de madera rústica de las áreas de circulación se arreglaron con Green Balls de craspedias, tulipanes y girasoles en frascos de malla y de vidrio.

A manteles
El turquesa resalta los colores suaves de elementos como la vajilla blanca de cerámica, los caminos beige y los estuches de cubiertos de yute, complementados con el suave brillo de los cubiertos de plata martillada. Las servilletas blancas de lino se adornaron con servilleteros de suculentas verdes. Los recordatorios son también suculentas sembradas en baldes de hojalata, adornadas con un corazón amarillo. Una tarjeta b­eige envejecida lleva un mensaje casual para los invitados, a quienes se les dio libertad para escoger su puesto.
La mesa de postres es un bar de paletas de frutas endulzadas con miel de agave. Los matices cromáticos se extienden a los sabores de piña con hierbabuena, ensalada de frutas, limonada de coco y mango con chile piquín. Las paletas, una tendencia mundial, encuentran en la marca colombiana POP, formas, tamaños y sabores únicos. En el montaje se utilizaron baldes y hieleras de hojalata, cajas de madera tallada y rústica, jaulas de alambre y botellas de leche antiguas. El mobiliario blanco permite que se destaquen la decoración y algunos elementos como una pared de troncos de madera.

Spot de picnic
En este espacio los invitados pueden disfrutar de un momento de relajación y conexión con la naturaleza, con ingredientes al alcance para armar su propio sándwich, acompañado de vino y champaña. El concepto de picnic se reafirmó con mantas tejidas, cojines de lino y bordados, parasoles de papel, canastas con alimentos y bebidas, y un detalle floral de tulipanes blancos dentro de una hielera.
Otra opción de comida son los antipastos. Hay gran variedad de embutidos, quesos, panes rústicos, patés y terrines, vegetales frescos y crudités, dispuestos sobre una mesa elaborada con una puerta de madera rústica, decapada en blanco, y los alimentos se sirvieron en bandejas blancas de cerámica. Todo esto decorado con candelabros blancos con velas amarillas, limones amarillos en canastas de musgo artificial y madera, y guacales llenos de tomates frescos. Los panes se ofrecen en canastos blancos de mimbre. Para quienes prefieren lo natural, hay una barra de ensaladas de vegetales frescos y orgánicos, donde los invitados pueden mezclar la de su elección en un frasco de conserva.


Entradas relacionadas