Ximena Sariñana, al compás del desamor
revista Fucsia, 14/12/2014
A sus 29 años, la mexicana lanza su tercer disco de pop 'No todo lo puedes dar', que incluye 13 canciones volcadas hacia los sentimientos que emergen tras el final de una relación.
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No todo lo puedes dar es una oda al desamor. ¿Es más fácil crear en medio de la tristeza?
No necesariamente. A veces he aceptado que sea así. Más bien se trata de ser un poquito más atontada (risas). No estoy pasando por situaciones complicadas, simplemente en mis canciones me gusta sacar esa parte de mí reflexiva e introspectiva, y llegar a conclusiones duras para que uno pueda tener mucha más luz en la vida. Creo que si uno afronta la tristeza, enfrenta lo peor de uno o los miedos más profundos. No soy una persona triste o depresiva, sino que allí encuentro el reto de sacar algo bueno.
En el disco se involucró por primera vez en la producción, la selección de colaboradores y la creación de arte, ¿cómo fue ese proceso?
Desde el principio sabía que iba a mantenerme cercana a mi intuición y esta guiaría el proceso. Las elecciones y decisiones fueron ciento por ciento personales, y eso me llevó a producir más de la mitad del disco. Igualmente, hay muchos colaboradores que me acompañaron en el camino, como el dominicano Álex Ferreira, y escogí un par de productores que me ayudaron a finalizar el trabajo: Jim Eno, baterista de Spoon, y Alejandro Rosso, de Plastilina Mosh.
Para la grabación del video de su primer sencillo, 'Sin ti no puede estar tan mal', trabajó bajo la dirección de su hermano Sebastián…
Estoy acostumbrada a trabajar con mi familia. Lo he hecho con mi papá y mi mamá en varias películas. Con mi hermano habíamos trabajado como músicos y ahora que es un director hecho y derecho, y tuve la oportunidad de trabajar con él en una serie para la Web, pensé que era la persona indicada, que entendía el tono que le quería dar al videoclip y me encantó.
Va a estar presente en Vive Latino 2015. ¿Cuál es la importancia de generar más escenarios como este en Latinoamérica?
Vive Latino es un festival al que le tengo mucho cariño porque crecí con él, fui de espectadora durante mi adolescencia y guardo varias presentaciones memorables. Un festival así es muy bonito porque reúne a muchas personalidades iberoamericanas y da a conocer sus propuestas. Este tipo de eventos ayudan mucho a la música.
¿Y su percepción del estado actual del pop mexicano?
Somos ya varias mujeres las que hacemos las cosas a nuestra manera y logramos un pop único, algo muy propio de cada una. Natalia Lafourcarde, Carla Morrison y Julieta Venegas, mucho tiempo antes, han marcado su propio rumbo, al igual que bandas como Torreblanca, que quieren lograr grandes cosas.
