Los errores a la hora de comprar que te están saliendo caros

Que levante la mano la que nunca se ha arrepentido de algo que compró, la que no tenga ropa sin estrenar en el closet (o de más de una postura) o la que cuando organiza su closet no se pregunte, “¿pero qué estaba pensando?”. Así es, a todas nos pasa.

En las tiendas y maratones de compras nos sentimos completamente en control, toda una experta en compras. Sin embargo cometemos muchos errores que nos terminan saliendo caros, muy caros. Por eso, con Black Friday, Cyber Monday, las rebajas de final, comienzo, ¡o mitad de temporada! Es decir, si tienes cuidado con estas cosas, te puedes ahorrar mucho dinero- dinero que puede ser reinvertido en unas compras más-.

Salirte de tu estilo personal

Lo has visto en las revistas de moda, se lo viste puesto a tu fashionista favorita, y ahora empiezas a verlo en las tiendas. ¡Pero no va contigo! Y si recuerdas los 10 pasos para encontrar tu estilo personal, si sigues adelante con la compra estarías dejando de lado el #4: compra lo que te queda bien a ti.

Demasiadas tendencias a la vez

Como buenas amantes de la moda todas somos culpables de caer en la tentación por las diez tendencias imprescindibles de la temporada. Y piensas, "pero si sí se me ven bien todas ¿qué tiene de malo?". Lo cierto es que una fashionista inteligente te confesará que no es necesario tenerlas todas, selecciona lo mejor de cada temporada, y así te evitar dejar una fortuna cada temporada.

Ignorar la talla o el ajuste

Entras a la tienda ¡y es amor a primera vista! Te enamoras del estampado de la camisa y tienes que tenerla. Pero al momento de revisar la talla es una más grande o pequeña que la tuya o si es preciso la que necesitas al momento de probarla no te queda bien. Se abre aquí, está floja allá, te aprieta por un lado o se te cae por el otro. Aún así la mayoría insistimos en llevarnosla, algo haremos, ¿no? Al final, descubres que definitivamente no te sirve y termina enterrada en el fondo del closet.

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Lo barato sale caro

Por más que esté rebajado, o “es que está regalado”, no significa que valga la pena. No te dejes engañar por el impulso del momento y piensa si de verdad de lo vas a poner, considera la calidad y si lo necesitas de verdad. Si no te va a durar ni dos lavadas no estás ganando estilo sino perdiendo plata. Además, este tipo de compras generan más basura en el mundo y de paso te deprimes, ¡sí!, las compras compulsivas generan una resaca emocional.

Comprar lo mismo de lo mismo

Está claro que a veces nos obsesionamos con sólo una prenda. Por ejemplo con una falda negra, tienes una larga, corta, media, de cuero, con cremallera, con vuelo o con un lazo. Por más que encuentres una más, ¡no hace falta que compres una nueva! Ahorra pensando en lo que ya tienes antes de comprar.

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No vestir según tu edad

Si estás en tus veintes no es necesario que te pases de formal vistiendo como alguien mayor, y si ya no lo estás, no trates de aparentarlo. Viste según tu edad, con lo que realmente te queda bien. Y no, no se trata de volverse “aburrida” después de una cierta edad, y si no nos crees que te lo digan estos ocho íconos de la moda mayores de 60 años.

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Compras cosas para ocasiones que nunca llegan

“¿Qué tal este vestidito por si algún día me sale un cóctel en una finca de clima templado en medio de los pastizales con la familia de mi jefe?”. Nunca va a pasar. Como comprar unos tacones altísimos por si algún día los necesitas cuando en realidad vas siempre en tenis. Compra pensando en tu vida y tu día a día y reparte el presupuesto dedicando el 70% para ropa de trabajo, 20% ropa de fin de semana y 10% ocasiones especiales.

Aprende a aprovechar el día de los descuentos para comprar con cabeza y no dejarte llevar por las ofertas para comprar cosas que realmente no necesitabas. ¡No basta sólo con que veas la palabra oferta o rebajas para sacar la tarjeta de crédito!

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