La hora del tornamesa

Los invitados están prendidos bailando al ritmo de la orquesta. De repente, la música se detiene y los músicos anuncian un breve descanso. Toda la buena onda queda en manos de una sola persona: el Dj. De él depende que los invitados no se sienten y que la pista de baile no quede vacía.

Si quieres que tu fiesta tenga futuro, una buena recomendación es contratar a Mario Tachak. Es Dj profesional desde hace 15 años y hace 12 empezó a poner música en matrimonios de amigos cercanos. Su buen conocimiento de géneros musicales como la salsa, el disco y el house hizo que su esporádica aparición en bodas se volviera tan frecuente, que ya olvidó la cantidad de matrimonios en los que ha tocado. Es considerado el padre de los Dj de matrimonios en Colombia y ha puesto a bailar a grandes personalidades de la sociedad de este país.

Otro muy popular por estos días, es Camilo Villegas Londoño. Se ha ganado el apelativo de Rumberto por su capacidad de pasar de un género a otro garantizando siempre la efectividad en la pista. Cuando no toca en los matrimonios más sonados del año, lo contratan para poner la música en las fiestas privadas de los publicistas y empresarios más importantes del país. Ha tocado en eventos en Medellín, Cali, Bucaramanga, Cartagena, Quito y Caracas.

Gracias a la trayectoria y buenos resultados de estos dos grandes, el negocio de ser Dj para bodas es cada vez más común y son cada vez más las personas que lo eligen como forma de vida. Dj Noink es uno de ellos. Se llama Mauricio Bayona y también es Dj profesional. Su fuerte es la música electrónica, la de los años 80 y, por supuesto, algo de crossover para mantener el hilo con la orquesta. Si necesitas orientación acerca de cuál es la mejor música para poner a bailar a tus invitados, Dj Noink también te asesora. Por su parte, Dj Staff ofrece una gran variedad de música, sintonizándoce con los gustos de los anfitriones.

Otra opción interesante son Los Trillis.Aunque no es propiamente Dj, esta banda toca la mayor parte del repertorio que uno pueda pedir. Es un grupo de artistas, publicistas y arquitectos que desde hace cinco años se dedican a tocar covers estilo cabaret con el mejor pop, rock y funk de los años 70 y 80.

Que la orquesta se vaya a descansar no quiere decir que la fiesta se detenga. Al contrario, ese es el momento de la fiesta en el que se puede desplegar más originalidad escogiendo a algunos de los mejores.