Personajes

Ismaelina, sobreviviente por 2 de las minas antipersonas

Alejandra Martinez, 17/11/2016

Fucsia. Co se une al movimiento Letras de apoyo de Publicaciones Semana, donde se quiere mandar el mensaje de rechazo contra el uso indiscriminado de las minas antipersonas y ser una fuente de recaudación de recursos con el fin de la recuperación de las personas afectadas.

Imagen: Facebook Ismaelina Burbano Narvaez - Foto:

Colombia, es el segundo país del mundo más afectado por las minas antipersonales. Según las estadísticas de IMSMA( Sistema de Gestión de Información sobre Actividades Relativas a Minas Antipersonal)en los ultimo 16 años se han visto afectadas alrededor de 10.590 personas a nivel nacional, de los cuales 1.038 son menores de edad, que han sido afectados por heridas o han fallecido a causa de estos artefactos.

Algo que debemos tener presente cuando se trata un tema como éste, es que los afectados no se deben llamar victimas, pues son sobrevivientes del conflicto armado. Hoy queremos compartirte la historia de una mujer que se ha visto afectada dos veces en su vida por este tipo de artefactos.

Conoce a Ismaelina Burbano, una mujer caucana de 49 años, campesina de nacimiento y amante de su tierra.Ha vivido dos veces los efectos del conflicto armado en Colombia. Su primera vez ocurrió en 1999, cuando a su corta edad (16 años) en una caminata con su padre,él piso una mina antipersonas lo cual le causo la muerte en el acto, y a ellala pérdida de su pierna derecha.

Facebook@Ismaelina Burbano Narvaez

Lo que cuesta aproximadamente una rehabilitación adecuada para los afectados por las minas, redondea el precio de $200.000.000 de pesos. Ismaelina, siendo una mujer humilde del campo no tenia los recursos necesarios para pagar la terapia y su rehabilitación, pero salió adelante de la mano de su familia y amigos. A los 32 años Ismaelina volvió a aprender a caminar y a seguir adelante con su vida.

Mientras que todo parecía volver a la normalidad, la catástrofe volvió a tocar su puerta. En el 2008 la guerrilla se tomo la vida de su esposo. Fue en ese momento cuando Ismaelina decidió dejar la vida del campo y abandonar lo que había sido su hogar y se traslado a la ciudad de Bogotá en compañía de su mamá, hermana y sobrina.

Hoy en día viven al sur de la ciudad y trabajan como recicladoras. Lo único que anhela Ismaelina es no tener que volver nunca a su pueblo, pues después de varios años a encontrado tranquilidad y paz dejando atrás la incertidumbre de la violencia de país. Su sueño, es poder comprar unas maquinas para abrir su propio negocio de calzado.

Como Ismaelina hay miles de afectados por las minas antipersonales. Únete al movimiento de Letras de Apoyo  y descarga la tipografía en www.letrasdeapyo.com desde $5.000 pesos o la donación que desees aportar en cualquier punto de VIA Baloto del país. Comparte #letrasdeapoyo y ayuda a más colombianos a reescribir sus vidas.