Malaika Firth, "la nueva Naomi Campbell"

Con tan sólo 19 años esta espigada adolescente es la nueva cara del mundo de las pasarelas. En una industria que sube y quema a sus nuevos rostros con la misma velocidad, solo pocas están llamadas a vencer el reloj del tiempo. Malaika Firth ya es parte de este grupo con tan solo un año de experiencia. 55 desfiles en está temporada Primavera -Verano 2014 lo demuestran, y  hacen de ella la consentida de diseñadores y las marcas más reconocidas del mundo.

Británica de adopción, a sus 19 años sorprendió al mundo en el 2013 cuando fue elegida como imagen de la campaña Otoño Invierno 2013-2014 de Prada, junto a la top Linda Evangelista. Esta fue la primer campaña de moda que realizaba, pero la segunda vez que una modelo de color representaba a la marca  en el mundo. La primera fue Naomi Campbell en 1994. 

Firth carga ahora la abanderada a favor de la diversidad racial en el mundo de la moda. Que sea justamente Prada quien haya creído en su imagen no es poca cosa: la casa italiana siempre ha establecido  el canon en las pasarelas, ha descubierto nuevos rostros y ha formado las carreras de varias top.

"Estoy muy orgullosa de ser la segunda modelo negra de Prada. Pero además, soy mulata. Soy birracial. Me gusta pensar que no soy blanca ni negra. Es asombroso: Naomi Campbell es tan grande, que me comparen con ella es... Wow", dijo en su cuenta de twitter.

París, Londres, Milán y ahora Nueva York. Todos se pelean por ella, han apostado por sus pasos fuertes, rostro delicado y energía exótica: “Yo nunca había utilizado tacones, practiqué dos semanas antes y en septiembre ya estaba subida a las pasarelas de Proenza Schouler, Calvin Klein, Burberry Prorsum, Céline, Valentino y Miu Miu”, cuenta en entrevista para Vogue Italia. Y aunque se había dicho que la descubrieron en una panadería, ella luego desmintió la historia en su perfil de Twitter.

Desfiles que en el 2013 la llevaron volando como un ángel de Victoria's Secret en el evento más sexy de la temporada,  y a ser este año la modelo principal del New York Fashion Week 2014.

Lejos de tener náuseas con su imprevisto éxito, asegura que seguirá siendo la misma, viajando a Kenia a visitar a su familia y a llevar regalos para los niños que viven en poblaciones vecinas. Además, dice también que anda en busca  "del amor verdadero". Muchas pasarelas le quedan, pero ya se perfila como la nueva diosa de ébano del mundo de la moda.