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Canasta Familiar

Guía para hacer mercado según tu presupuesto

, 28/9/2011

Si estás cansada de que la comida no dure en tu alacena y que al ir a los almacenes no te alcance el dinero, te recomendamos los siguientes trucos que, aunque requieran tiempo y paciencia, te ayudarán a ahorrar más dinero para la canasta familiar. Toma lápiz, papel y calculadora.

Foto: Thinkstock - Foto:

En el año
Compra como para un almacén: existen almacenes especializados en venta de productos al por mayor, donde es más barato comprar porque venden todo en grandes cantidades. Establece uno o dos días en el año para comprar todo aquello que siempre se ofrece en el hogar y puede almacenarse por largos periodos de tiempo, como los productos de aseo y alimentos no perecederos.

Aproximadamente puedes hacer una inversión de uno, dos millones de pesos o más, todo depende de tu presupuesto, pero tendrás la certeza de que no te hará falta crema dental, sal o atún el resto del año y además habrás ahorrado mucho dinero.

Útiles escolares para siempre:
cada año surge la misma preocupación relacionada con la compra de los útiles escolares, que cada vez son más caros. Un día lejano del regreso de vacaciones, puedes comprar al por mayor una caja de 50 lápices te durará para siempre, si la sabes administrar; se necesita una vida entera para gastar 20 borradores o 30 carpetas. Si ya conoces el tipo de cosas que le piden a tus hijos, llama y visita directamente a las empresas productoras o compra en los lugares donde venden al por mayor.

En el mes
Compra y congela: una buena opción para facilitarte la vida y respetar el bolsillo es ir a una plaza de mercado fresco grande, comprar en cantidad y preparar la comida en bolsas o recipientes de plástico sellados, para meterlas al congelador. Zumo de frutas en porciones para hacer el jugo, arvejas desgranadas, carnes, zanahoria picada, guiso de tomate y cebolla; todo lo que necesites en el día a día puedes dejarlo listo en un solo día, de tal manera que a la hora de cocinar sólo tengas que descongelar y todo esté semi-preparado.

Examina toda la góndola: las marcas líderes suelen estar ubicadas a la altura de los ojos, esa posición es más costosa, pero hay productos en otras secciones que pueden ser más económicos.
No pagues con tarjeta de crédito: no tiene sentido pagar un porcentaje mayor por una comida que ya no existe.

En la semana
Menú semanal:
puedes elaborar un plan para los almuerzos y comidas de toda la semana, así podrás comprar justamente los alimentos requeridos en las porciones justas. Así te ahorrarás más dinero y no se echará nada a perder.

Identifica los días y productos de promoción: la competitividad entre los almacenes ha impulsado una serie de días en los que ciertos productos son más baratos, presta mucha atención y compra únicamente lo que están promocionando; recuerda que la estrategia de mercado que está detrás de este tipo de promociones consiste en ubicar las gangas en lugares difíciles de encontrar o junto a productos que son más rentables, para que termines llevando lo que no está promocionado.

Elabora una lista:
cuando notes que hacen falta productos específicos en tu casa, haz un listado y cíñete a él.

Gasolina vs. Economía: haz cuentas qué te sale más barato, si hacer mercado en un lugar muy económico pero que te queda muy lejos, o hacerlo cerca a tu casa; muchas veces vale más la gasolina o el taxi que los pesos que te ahorras en el almacén de la vuelta de la esquina.

Come antes de salir: si tienes el estómago lleno cuando hagas mercado, seguramente no se te antojarán tantas cosas.

Evita los tumultos:
procura ir en un día y una hora en la que no haya tanta gente, así podrás comprar precios con más tranquilidad

Sin niños: así se te facilitará el trabajo y no te vas a distraer para hacer las cuentas.