Visionarias de la moda: así luce una ejecutiva

Revista FUCSIA, 12/5/2014

Elvira Serra no se baja de sus tacones de diez centímetros, porque sabe que reafirman su feminidad. Esta gerente de una importante firma de productos de belleza trabaja 24 horas, pero su motivo de orgulloy de vida es su hija.

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Elvira Serra Díaz-Mauriño es gerente de marketing de L’Oréal Lujo

Cuando oye la expresión “mujer ejecutiva”, ¿qué imagen viene a su mente?

Me imagino a una mujer que no para de trabajar durante las 24 horas para compaginar todas las facetas de su vida como madre, esposa y profesional.

Una pieza de su clóset que la empodera o que elige cuando tiene que lidiar con duras jornadas.

Mis tacones de 10 centímetros, que me facilitan no perder mi lado femenino cuando tengo que sacar mi garra más masculina.

¿Cómo definiría el liderazgo femenino?

Más organizado, con poder de decisión, sensible y, a veces, demasiado visceral.

Lo que más le gusta de trabajar con su compañía.

Que trabajo para hacer que los demás se sientan más bellos.

La apuesta más arriesgada que su compañía ha emprendido de su mano.

En España íbamos muy mal en ventas y le aposté, en lo que restaba del año, a un solo producto. Esa vez me salió bien, pero no siempre tiene por qué ser así.

¿Cuál es el logro por el que saca pecho?

Mi hija, lo más lindo del mundo. Me enseña cada día cuál es la verdadera prioridad.

Una mujer que la haya inspirado en términos profesionales.

Coco Chanel, por su visión de la mujer del siglo XX, por su rebeldía.

En porcentaje, ¿qué tan importante es la estabilidad sentimental en el desarrollo exitoso de una carrera profesional?

Ciento por ciento. Tu equilibrio personal se refleja en tu equilibrio profesional.

¿Qué es lo primero que hace cuando se levanta y lo último que hace antes de acostarse?

Ver a mi hija y darle las buenas noches a mi marido.

¿Hay algo que como ejecutiva mujer haya tenido que hacer de más que sus colegas hombres?

No, L’Oréal es una empresa que busca siempre el equilibrio profesional entre sus empleados y cuida mucho este aspecto.

Un lema de vida que se repita a sí misma todos los días.

Lo bien hecho, bien parece, y ponerle una máxima atención al detalle, más cuando me dedico al sector del lujo.