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La irreverente Carine Roitfeld

Lila Ochoa, 13/9/2012

Considerada un ícono de la moda, fue directora de Vogue Francia hasta el año pasado. Revolucionó el mundo de las revistas de moda con sus polémicos artículos y fotos. Parece que eso le costó el puesto. A raíz de su colaboración con la firma de cosméticos MAC, FUCSIA tuvo la oportunidad de entrevistarla en exclusiva.

Fotos cortesía Mac Cosmetics - Foto:

Fruto de los cambios que introdujo la internet, el estilo y la manera de ver el mundo no se limitan a imaginarse las páginas de una revista. El ejercicio de interpretar y editar la moda ha cambiado para siempre. Los estilistas son ahora tan importantes como las modelos o los diseñadores, pues promocionan la moda que impone la calle, no los diseñadores en sus escritorios.

De padre ucraniano, productor de cine, Carine Roitfeld nació en París, en 1954.
Pasó su infancia en el barrio 16 y describe esa época de su vida como “burguesa”. Empezó a escribir en la revista de moda inglesa Look Now y más tarde trabajó como estilista en la Elle francesa.

En 1986 conoció, en una sesión de fotos que hacía su hija Julia para la revista Vogue Enfant, al famoso fotógrafo peruano Mario Testino.
Allí nació una gran amistad y él empezó a trabajar para las ediciones francesa y americana de Vogue. Por la misma época, Carine se convirtió en consultora de Tom Ford y su musa para Gucci e Yves Saint Laurent, e inventó el llamado “porno chic”.

En 2001, Jonathan Newhouse, de Condé Nast, la editorial dueña de Vogue, le propuso ser directora de la versión francesa. La industria de las revistas y la de la moda tomaron con escepticismo su nombramiento, pues la antecedía su polémica reputación. Pero se ganó el respeto y la admiración de sus colegas gracias a la calidad de su trabajo, que hizo que las ventas aumentaran sustancialmente.

De allí en adelante todo es historia. Roitfeld fue declarada una de las personas más influyentes del mundo por la norteamericana Times, y Vanity Fair la catalogó como una de las diez mujeres mejor vestidas.

En diciembre de 2010, Condé Nast emitió un comunicado anunciando que la señora Roitfeld cesaría en sus funciones como directora a partir de enero del 2011 para dedicarse a sus proyectos personales. Se especuló sobre las razones por las que renunció a su cargo, pero hasta hoy nadie conoce la verdadera causa. Se habló de un conflicto con la gente de LVMH, poderoso anunciante de la revista, o de una producción fotográfica muy atrevida, que involucraba niñas.

Pero la verdad es que Carine está dedicada a sacar adelante el proyecto de una nueva revista, CR Fashion Book, publicada por Media Group LLC, editora entre otros de la ‘biblia’ de las tendencias, Visionnaire. Condé Nast, en desacuerdo con la nueva publicación, prohibió a fotógrafos y escritores colaborar con esta, cuya primera edición se espera para septiembre.

Entre los proyectos que ha hecho Roitfeld últimamente están las vitrinas de los almacenes Barneys, campañas publicitarias para Chanel y Givenchy, y la línea de cosméticos para MAC.