Gris: una nueva apuesta de diseñadores colombianos

En el segundo piso de una casa de la zona G, en Bogotá, luego de subir una escalera amarilla y en medio de un restaurante y una agencia de publicidad, funciona desde hace poco tiempo Gris, la reciente apuesta de un colectivo de diseñadores que encuentra en la reinvención su punto en común. Justamente este lugar de apariencia industrial, amplio y cuidadosamente ordenado, fue la excusa para congregar a Manuela Álvarez, Laura Laurens, Nicolás Rivero, Vanessa Gómez, Julieta Suárez, Mariana Vieira, Liliana Andrade y Sarah Cohen, quienes no arriesgan la calidad de su trabajo por producir en serie. 

Con sus marcas –Manuela Álvarez MAZ, Laura Laurens, A New Cross, Julieta Suárez, Vieira, Franca y Suki Cohen– han hecho de Gris un referente de diseño colombiano alternativo en el que las prendas masculinas y femeninas, el calzado, las carteras, la ropa interior e, incluso, el mobiliario, alternan sin opacarse el uno al otro. 

Si bien son firmas distintas, entre sí lograron un sitio articulado porque cada uno se involucró de cabeza con la experiencia de compra del visitante. “Nos gustó mucho la ubicación, que constituye una zona fresca, muy caminable, donde hay buenos restaurantes, que no está contaminada por los bares y donde se encuentra la mayoría del target al que le apuntamos. El espacio es lo suficientemente amplio para lo que estábamos buscando y las marcas funcionan en armonía unas con otras, no es que haya unas cosas completamente diferentes. Cada firma tiene su propio estilo, armonizan muy bien y se complementan dentro de un mismo look para un determinado cliente”, cuenta Nicolás Rivero de A New Cross, quien estaba esperando la locación adecuada para vender en Colombia, pues su mercado se había centrado en Europa. 

Aunque todos habían oído hablar de los demás, Julieta Suárez se encargó de reunirlos porque un amigo suyo le dijo que el espacio estaba libre para la apertura de una boutique, y junto con Laura Laurens, con quien ella ya tiene la tienda Número 3, emprendieron la búsqueda de diseñadores que se sumarán a una apuesta por una manufactura local de piezas únicas, la atención en los detalles en la elaboración de las prendas y una noción de estilo minimalista, moderno y sofisticado. 

“Gris tiene que ver mucho con lo neutro, también con la concepción del espacio y lo que significa la arquitectura para el cuerpo. Es un elemento que remite al concreto, al material mismo del lugar. El eslogan es ‘Diseño en construcción’, y en esa medida habla del ejercicio de elaboración arquitectónica dentro del cuerpo, cómo lo cobija. No es una idea absoluta y lineal, sino algo que se va construyendo, tomando forma y cambiando según lo que el mercado vaya pidiendo o lo que nosotros queramos”, dice Julieta. 

“El diseño colombiano va por muy buen camino y estoy feliz de ver a los diseñadores nuevos, siento que toman un rumbo completamente diferente y global. Los de ahora no se parecen a los creadores clásicos, y están haciendo cosas distintas. Están siendo ellos mismos y trabajando por convicción y porque les gusta”, explica, por su parte, Nicolás Rivero de A New Cross. 

Entre las colecciones que irán rotando cada quince días –incluidos los muebles de Vieira– y que hoy se muestran cargadas de estructuras, en materiales como la lana, la seda, la alpaca, el algodón en tonos negro, blanco, gris y beige, también habrá lugar para diseñadores invitados a instalaciones temporales, propuestas especiales y proyecciones de fashion films. Gris quiere ir más allá de lo que es solamente ropa y moda.