¡Liberen a los pezones!
Rihanna es la última celebritie en unirse a la campaña #FreetheNipple, con ese traje en el que apareció semidesnuda en los premios del CFDA. Todo nace a partir de una protestar por el sexismo y la censura de la famosa red Instagram.
Su osadía responde a una estrategia bien pensada por la que Rihanna ha estado apostando a modo de reivindicación desde que Instagram eliminara unas fotografías suyas en las que aparecía en topless: protestar contra la censura que impone esta red social a las fotografías que muestran senos o pezones.
Recientemente, Scout Willis, hija de los actores Bruce Willis y Demi Moore, publicó unas instantáneas en su cuenta personal de Twitter paseando sus pezones por las calles de Nueva York. Junto a la fotografía, la joven de 22 años incluyó un mensaje contundente: “Legal en NYC, pero no Instagram. #FreeTheNipple”, que se viralizó en la red en cuestión de horas.
Una de las fotografías subidas por Scout Willis bajo el hashtag #FreeTheNipple
La campaña que está trás del hashtag #FreeTheNipple (en español,
liberen el pezón) no es nueva. Sin embargo, el impulso que ha recibido
la iniciativa en los últimos días por parte de estas dos mujeres ha
vuelto a reavivar la polémica sobre la doble moral que mantiene
Instagram en lo que respecta a su política de uso y su radicalización en
su cruzada contra la libertad de expresión, especialmente cuando las
fotografías exponen el cuerpo femenino.
De hecho, Scout Willis fundamenta gran parte de sus consideraciones
sobre la arbitrariedad de Instagram remitiéndose a una de las cuentas
que alberga esta red social. El mencionado perfil pertenece a Dan
Bilzerian, un jugador de póker profesional al que le gusta alardear de
su vida de lujo y su gusto por las mujeres aportando fotografías de alto
contenido sexual, sexistas muchas de ellas, o en las que se pueden ver
pezones. Eso sí, escondidos tras un icono que este añade antes de
subirlas o tras pistolas reales (Bilzerian es también un fanático de las
armas, afición que tampoco se priva de mostrar al mundo a través de su
cuenta). En la actualidad, su perfil en Instagram cuenta con
más de dos millones de seguidores.
Los términos de uso de Instagram prohíben “subir imágenes u otro tipo de contenido violento, que muestre desnudez completa o parcial, discriminatorio, ilícito, transgresivo, de odio, pornográfico o sexualmente sugestivo vía este servicio". A este respecto, la iniciativa #FreeTheNipple se alza como una plataforma a través de la que denunciar las restricciones al desnudo que impone la red social y que, en ningún caso, parecen regularizar a todas las cuentas que esta alberga.