La ciencia ha determinado que la presencia del padre, o de una figura masculina, es esencial en el desarrollo del ser humano. ¿Quieres saber por qué? Sigue leyendo.
Pareciera que la figura materna es mucho más importante para el desarrollo de los hijos, que la del padre. Y todo se debe a los estereotipos y los mitos sociales. Así lo afirma Susan Newman, doctora en psicología social.
Y anular esos estereotipos es demasiado complicado. Sin embargo, una observación hecha por el investigador Michael Lamb demostró que los bebés se apegaban a los padres al mismo tiempo y de la misma manera que lo hacían con las madres.
Un estudio del Pew Reserch Center Report dio cuenta de que en las dos últimas décadas ha aumentado el número de padres que se quedan en el hogar para cuidar de sus hijos.
Sin embargo, como los estereotipos están presentes, la doctora Newman recuerda, para Psychology Today, los comerciales de una marca de productos para el cuidado personal, en la que los deportistas de los más recientes juegos olímpicos decían: “Gracias, mamá”. ¿Y los papás? Completamente anulados.
Pero, pese a esos conceptos, la ciencia asegura que tanto padres como madres ejercen una influencia diferente, pero igual de importante. Por ejemplo: