La píldora anticonceptiva constituye un elemento de protección contra el cáncer de endometrio (o cáncer de útero) y permitió evitar 200.000 cánceres de este tipo
en los últimos diez años, según un estudio.
La revista
The Lancet Oncology Journal publica el resultado del trabajo de científicos británicos que estudiaron a unas
27.000 mujeres con cáncer de útero en 36 país de Europa, América de Norte, Asia, Australia y Suráfrica.
Calcularon que en espacio de 50 años, unos 400.000 casos de cáncer de endometrio, de los 3,4 millones censados en esos países, se pudieron evitar con el uso de contraceptivos orales,
200.000 de ellos los diez últimos años (2005-2014).
"El efecto protector importante de los anticonceptivos orales contra el cáncer de endometrio persiste años después de dejar de tomar la píldora", subraya por su parte la profesora Valerie Beral, de la universidad de Oxford, que coordinó los trabajos.
El efecto benéfico, añade, se hace sentir en mujeres que sólo tomaron la píldora unos años y se prolonga mucho más allá de los 50 años, la edad en que comienza a manifestarse el cáncer de endometrio, diferente al de cáncer de cuello del útero, detectable mediante un frotis.
Según el estudio, la toma de contraceptivos orales durante cinco años reduciría un 25% el peligro de cáncer de útero antes de los 75 años. Su toma durante diez años reduciría prácticamente a la mitad el peligro de un cáncer de endometrio, de 2,3 casos a 1,3 por cada 100 mujeres.
Si bien estos contraceptivos pueden tener un efecto benéfico de cara al cáncer de endometrio, estos contraceptivos aumentan el riesgo de contraer ciertas enfermedades cardiovasculares (infartos, accidentes vasculares cerebrales), recuerdan especialistas en un comentario adjuntado al estudio.
También persiste el debate sobre los riesgos de contraer ciertos tipos de cáncer por la toma de contraceptivos orales.
En 2005, la IARC, la agencia del cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS), estimaba que la píldora era responsable de un ligero aumento del riesgo de cáncer de pecho, de cuello del útero y de hígado, al tiempo que ejercía un efecto protector contra el cáncer de ovarios y de endometrio.