Este tipo de zapato es cerrado y elegante. Te mostramos cuatro formas de utilizarlos para todo tipo de momento.
Estos zapatos nacieron en Escocia e Irlanda. Tuvieron gran acogida en la Universidad de Oxford, es por esto que llevan este nombre en la actualidad. Existen diferentes tipos de diseños, están los lisos, los que tienen punteado en las costuras y otro tipo de variaciones tanto en la punta como en la parte trasera.
Gracias a su gran variedad de estilos, se pueden utilizar para todo tipo de ocasiones. Los que van en tonos beige y café se usan en su mayoría para eventos o planes informales, mientras los negros son utilizados en eventos elegantes y formales. También existen algunos metálicos o en colores vivos, que son perfectos para outfits casuales.
Los oxford han pasado de ser una prenda netamente masculina, a convertirse en una pieza clave en el clóset de la mujer. Por esta misma razón han nacido un millón de variaciones en su tacón, colores y materiales. Puedes utilizarlos con unos boyfriend jeans, unos skinny jeans, hasta con una falda, solo tienes que adaptar el color y los materiales a la ocasión de uso.
Son un tipo de zapatos muy cómodos y que le dan un look particular al outfit. Son absolutamente versátiles, hoy en día son como un par de tenis, debes tenerlos y servirán para cualquier momento. Pueden ser cómodos, pero a la vez tan elegantes como un par de tacones.
Uno de los más utilizados son los bicolor blanco y negro. Este tipo de zapatos puedes llevarlos con una pinta totalmente de negro o blanca. Puedes también combinar el negro, el gris y el blanco y variarlo en las diferentes prendas del look.
Par darle un toquqe más divertido y ‘edgy‘ a tu look, inclínate por zapatos Oxford metálicos o en colores vivos. Con atuendos negros lograrás que tu ‘outfit‘ realmente se destaque.