Hemorroides

¿Cola adolorida? 8 remedios naturales para eliminar las hemorroides

RevistaFucsia.com, 6/12/2011

No te asustes con esas ronchas que no te explicas de dónde pudieron haber salido. Mujeres de todas las edades sufren de este mal, más aún si no llevan una dieta balanceada, si el colon les juega malas pasadas o si se encuentran en la etapa de embarazo. Alivia esta molesta dolencia con métodos naturales y rápidos.

Una de las causas de las hemorroides es la alergía a ciertos alimentos (Foto: Thinkstock) - Foto:

Pica y pica,  y evidentemente no es mucho lo que tu puedas hacer cuando males como las hemorroides y/o picor en el ano comienzan a atacarte, literalmente, por la retaguardia. Entre ungüentos y baños de agua fría buscas una solución a un problema que realmente requiere de una buena alimentación y de descubrir qué sucede en el trayecto de tu estómago al baño. Una vez identifiques si son parásitos, sensibilidad a los alimentos o una fuerte inflamación, lo demás es pan comido.

¿Cuál será?
Parásitos: Hazte un examen de muestra fecal en un laboratorio y cerciórate si se trata de animalitos que habitan en tus intestinos. No siempre son visibles al ojo humano en el momento que evacuamos. Además de dolorosos retorcijones de la nada, rasquiña y diarreas constantes, las lombrices producen muy mal olor en las heces y, poco a poco, las hemorroides.

Sensibilidad a los alimentos: Cuando ingieres ciertas comidas a las que tu intestino y estómago son alérgicos, las pulsaciones de tu corazón van aumentando de manera considerable, saliéndose del parámetro de lo normal, y tu organismo los rechaza inmediatamente evacuándolos de forma brusca y sin procesar.

¿Cómo saber a qué eres “sensible”? La doctora McKeith propone el Test del pulso: tomate en las mañanas tu pulso radial colocando el dedo índice en la muñeca y cuenta el número de latidos en un minuto. Lo normal es entre 50 y 60 latidos. Luego de ingerir alimentos que tu crees te hacen daño en el proceso digestivo, haz el mismo test y notarás la diferencia si alguno de ellos no es “bienvenido” en tu estómago. Si este es tu caso, disminuye el consumo de picantes, cítricos, lácteos y maíz, los más propensos a este tipo de reacciones.

Hemorroides: Aparecen cuando el hígado está congestionado por una mala alimentación. Son venas y capilares inflamados alrededor del ano, de color rojizo o morado, sumamente incómodos y dolorosos, incluso con producción de sangrado, la señal con las que las identificamos rápidamente. Ingerir mucho chocolate, café, productos de panadería y lácteos son su principal causa.

8 pasos contra las hemorroides
En las mañanas
1.    Té de diente de león:
La congestión hepática es el primer paso para un ataque doloroso de hemorroides. Lo primero que debes hacer es sanear éste órgano para limpiarlo y eliminar las impurezas. La infusión de diente de león es la indicada para este proceso. Bebe de 3 a 5 tazas al día.

En la tarde
2.    ¡Duele mucho!:
El agua es un salvador de emergencia no solo para quitar la rasquiña, sino para bajar la desinflamación por un buen tiempo ya que  reduce la congestión de los vasos sanguíneos. Coloca tu trasero en un recipiente de agua fría durante unos dos minutos. También puedes usar compresas de agua fría y caliente, alternándolas cada 3 minutos.

3.    Agrega a tu dieta arándanos, repollo y coles de bruselas, perfectas para el funcionamiento normal del hígado.  Además, mucha agua y productos con fibra. Cuando estás en un constante sube y baja entre días de estreñimiento severo y diarreas intensas, es más factible que las hemorroides aparezcan y te lastimes el recto.

4.    De un lado para el otro: Si estás embarazada, toma descansos a lo largo del día mientras permaneces recostada hacia un solo lado, izquierdo o derecho, durante 15 minutos. Esto alivia la presión.

5.    Aceite del bueno: Bebe una cucharadita de aceite de linaza antes del desayuno, almuerzo y comida.

En las noches
6.    Las cremitas de la abuela:
Aplica sobre el área afectada pulpa de aloe vera (preferiblemente fría) por lo menos dos veces al día. Opta por aquellas que son hechas a base de caléndula, con bondades cicatrizantes y que a la vez regeneran los tejidos malogrados. Otra opción es la pomada de castaño de indias  y la de celidonea. Puedes aplicarlas en las mañanas después del baño y en las noches al acostarte.

7.    Trucos homeopáticos: Arcilla verde mezclada con agua para el dolor. Infusiones con hamamelis, azufre y sepia, productos disponibles en tiendas de homeopatía.

8.    Cardo lechero: Esta milagrosa hierba sirve para afecciones de la diabetes, el colesterol alto, la cirrosis, hepatitis crónica y para ablandar las heces. Consume una cápsula de esta planta para ayudar a la digestión.