Top 5: los métodos más extremos para perder peso

Fucsia.co, 2/4/2014

Comer mediante un tubo nasal y coser una malla en la lengua son solo algunas de las descabelladas técnicas a las que acuden quienes quieren bajar de peso. ¿Cuáles son sus riesgos? Conoce qué hay detrás de su aparente efectividad.

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Perder peso gradualmente a través de una dieta balanceada y actividad física es la forma correcta de preparar a nuestro cuerpo para un cambio. Sin embargo, los métodos milagrosos que prometen tener un cuerpo de ensueño en pocos días, y hasta semanas, cada vez toman terreno, arriesgando la vida del paciente y causando efectos adversos en el organismo a corto y  largo plazo. 

Enlistamos los cinco métodos más populares del mercado y sus respectivos contra:

1. Malla supralingual. Se trata de una malla de polietileno que se cose encima de la lengua, con cuatro puntos de sutura. Esta obliga a los pacientes a evitar los alimentos sólidos durante un mes, debido al dolor que causa entrar en contacto con la malla. Fue creada por el cirujano plástico Nicolás Chugay. Recientemente, el INVIMA prohibió este procedimiento por representar un riesgo para la salud (lee: 'No más tortura con la malla supralingual').

Contras:
“Descompensación, hipoglicemia, anemia, desnutrición y desequilibrio hidroeléctrolítico son algunos de los efectos negativos, a corto plazo, que una persona que se somete a este procedimiento puede sufrir. A largo plazo, existen altas probabilidades de padecer osteoporosis, anemia crónica y desnutrición severa”, aseguró a Fucsia.co Carolina Camacho, nutricionista dietista.

2. Alimentarse por la nariz.  También es llamada la K-E Diet (Ketogenic Enteral Nutrition) o la dieta de las novias, pues se creó para las mujeres que quieren bajar de peso -en tiempo record- para su boda.  En 10 días, y a través de un tubo nasogástrico, por el que se introduce el alimento de forma líquida, quienes se someten a esta técnica deben comprometerse a no consumir sólidos y, por el contrario, optar por tés sin azúcar, bebidas libres de calorías y agua, para calmar la ansiedad. Es una dieta hipocalórica, de tan solo 800 calorías diarias, que promete a quienes se adhieran reducir un 10 por ciento de la grasa corporal.
La dieta fue creada por el doctor Oliver Di Pietro, quien, sin ningún control, ofrece esta técnica en su clínica en Estados Unidos.

Contras:
"Esta  dieta es poco menos que una locura. Si el vómito autoinducido después de las comidas constituye un trastorno de la alimentación, ¿qué  está infundiendo una fórmula líquida a través de una sonda en el duodeno y sin indicación médica? No tiene nada en absoluto que ver con la salud y, básicamente, crea la idea de que la pérdida de peso por cualquier medio es aceptable ", aseguró en un artículo publicado en el Huffington Post, el doctor David L. Katz, director del Centro de Estudios de Prevención de la Universidad de Yale (Estados Unidos).


3. Inyecciones de orina. Sheryl Paloni, de Boston, fue la precursora de esta “dieta”, con la que aseguró perder 20 kilos en cinco meses. La orina se inyecta vía intravenosa y es proveniente de mujeres embarazadas, lo que según  Paloni, acelera el metabolismo. Asimismo, se promete a los pacientes que pueden perder hasta 20 kilos en seis meses. ¿Número de calorías permitido? 500.

Contras:
Según expertos del Instituto Médico Europeo de la Obesidad, “este régimen es de los más peligrosos que existen porque inyectar orina a la sangre puede provocar la muerte a causa de septicemia, casi instantánea. Además, se engaña al cuerpo y se le hace creer que está en proceso de embarazo y crea desequilibrio en las personas. Por otro lado, consumir apenas 500 calorías es lo que realmente hace bajar de peso y no la inyección”.


4. Descargas eléctricas. La técnica, creada por médicos del Hospital de Elche (España) busca reducir el apetito y la ansiedad de comer, mediante una descarga eléctrica suave e indolora -según aseguran- en el abdomen; esto con el fin de que el estómago digiera los alimentos más lento que en el proceso normal y, como consecuencia, se pierda peso.

“La media de pérdida del medio centenar de pacientes se sitúa en 8 kilogramos a los tres meses y, en todo caso, más del 75 por ciento de los usuarios perdió un mínimo de 5 kilogramos”, afirmó a EFE el coordinador del proyecto, Jaime Ruiz-Tovar, miembro de la unidad de Cirugía Bariátrica del Servicio General y del Aparato Digestivo.
 
Contras:
Este es un método pionero en casos de obesidad, por lo que aún se encuentra en modo prueba. Por otro lado, y según aseguró a EFE, Ruiz- Tovar, debe ir acompañado de una alimentación saludable y ejercicio físico; es decir que no debe ser concebido como un método milagroso para bajar de peso.

5. Dieta del aire. Consiste en poner alimentos imaginarios en el plato, cortarlos, llevarlos a la boca y digerirlos. Sus adeptos o autodenominados “respiracionistas” se alimentan, como su nombre lo dice, del aire, y no es literal. La idea es que quienes la practiquen deben hacer uso de su imaginación al momento de “alimentarse”, para que el cuerpo pueda asimilar los “nutrientes” del aire.

De hecho, Valeria Lukyanova, más conocida como la “Barbie humana” ha asegurado al International Bussines Time, que solo se alimenta de aire y luz solar, y, agrega no sentir hambre en absoluto.

Contras:
“El mayor efecto adverso de no comer es no sentirse bien, acompañado de la sensación de hambre. La comida es esencial para vivir. Alguien que haga esto de forma prolongada o repetitiva podría tener graves problemas”, según asegura el doctor Dan E. Fisher, colaborador y especialista en medicina interna del sitio web Health Tap.

Asimismo, la profesional en medicina, Lina Jaime asegura que, en general, someterse a este tipo de procedimientos tiene consecuencias nefastas para el organismo, entre las que se encuentran, problemas renales, cardiacos, pérdida de masa ósea y muscular, bajo desempeño físico e intelectual, desórdenes mentales, entre otros; por lo que recomienda, antes de empezar una dieta o procedimiento, evaluar los efectos adversos según el historial médico, para lo cual se debe contar con la asesoría de un profesional.

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