Secretos antiedad

Con más años y más bella: los 10 secretos antiedad

RevistaFucsia.com, 29/1/2012

El paso de los años es inevitable. La cosmética y la industria de la moda han hecho todo lo posible para evitarlo, cuando el secreto de la “eterna juventud” está en nuestra casa o en lo que nos llevamos a la boca. Trucos que se esconden en el baúl de los recuerdos pero que son infalibles a la hora de detener un poco más el tiempo.

Aplícate mascarillas sin distracciones ni estrés: cuando estás tensa o estresada, la piel tiene la misma reacción y no deja que los componentes penetren adecuadamente. (Foto: Thinkstock) - Foto:

Hay cosas que el maquillaje no puede ocultar: una dieta inestable y hábitos poco saludables se verán reflejados en tu piel, y en esas arrugas prematuras llegan a convertirse en la pesadilla de cualquier mujer. Lo mejor es empezar por lo básico: hacerle caso a esos secretos de la abuela que nos dan promesas de ser jóvenes por más años. Un consejo: atrévete, porque hay remedios de la madre naturaleza que son mucho más efectivos que la costosa crema que encuentras en el mercado. Apunta y practica.

1.    Toma té:
Uno de los favoritos al momento de cambiar las gaseosas y demás bebidas con demasiado dulce. Su gran número de sustancias antioxidantes son el mecanismo perfecto para limpiar el organismo y eliminar las sustancias tóxicas que acumulan grasa en nuestro cutis. Los recomendados: el rojo y el verde.  

2.    Bebe mucha agua:
El líquido que ingreses a tu cuerpo, dependiendo de su pureza, hidrata considerablemente la piel y mejora el proceso metabólico, que también es crucial para la eliminación rápida de los residuos tóxicos que rondan por el cuerpo después de que comemos. La hidratación con agua también le da luminosidad a la piel y le quita el exceso de grasa. Cuando no bebes el líquido suficiente, estás promoviendo la aparición de celulitis y de las arrugas. Hazle caso a los rumores de pasillo: bebe por lo menos un litro de agua al día.

3.    Fuera el estrés: El mal genio y la presión tal vez no te saquen canas verdes, pero sí le darán vía libre a las arrugas. “No pelee tanto que se vuelve vieja”, es una verdad irrefutable, ya que con el estrés y descargas emocionales son contraproducentes con los procesos normales que hace el cuerpo las 24 horas del día. Quítate el estrés con técnicas de relajación, concentrándote sobre todo en tu respiración, que es la que le da, literalmente, un “nuevo aire” al cuerpo para purificar pulmones y organismo. Siéntate en un lugar a prueba de ruido, con colores claros y sin ningún tipo de distractores. Relaja tus manos y en posición de flor de loto, inhala y exhala, mueve la cabeza en círculos y recuéstate después de 5 minutos.

4.     Alimentos 10:
El aceite de oliva, el vino tinto, los lácteos bajos en grasa, el ajo, el perejil, los cereales integrales, la zanahoria, la espinaca, las fresas y demás frutos rojos, los cítricos, la soya, la miel y las semillas contienen sustancias naturales que evitan la producción de radicales libres, aquellos que deterioran las células del cuerpo, y, por supuesto, de nuestro cutis. Si consumes antioxidantes (presentes en estos alimentos), la célula permanece joven por más tiempo y retrasa el envejecimiento.

5.    No todas las cremas son malas: Aquellas que tienen componentes naturales, como extracto de papaya, aguacate, frutos cítricos y agua de rosa, son las mejores. Ninguna crema te quitará las arrugas que ya están: simplemente hidrata la zona afectada haciéndolas un poco más tenues debido a la concentración de agua que pueden absorber. ¿Cómo hacerlo sin que sea mecánico ni inútil? Identifica tu tipo de piel (seca, grasa o normal) y elige la más adecuada. Aplícate grandes cantidades en zonas críticas, como los ojos (pata de gallo y ojeras) y haz masajes circulares para que penetren. Deja que la crema se seque sola. No dejes de lado sitios importantes como el busto y el cuello, siempre en dirección hacia la barbilla. Lleva crema para las manos en tu cartera: los desinfectantes a veces resecan mucho la piel. Utiliza el protector solar, incluso cuando el día está nublado: algunos de ellos tiene ingredientes especiales para proteger de la polución. Si las manchas son un problema, cómprate una crema de concha de nácar.

6.    Dormir mínimo 8 horas:
No hay mejor remedio para un cuerpo y una piel cansada que dormir bien. Durante el sueño, el cuerpo regenera células. Cuando no te acuestas temprano o no duermes lo que debes dormir, interrumpes este proceso. No recurras  a pastillas, sitios con ruido, música ni ropa apretada: ésta afecta la circulación de la sangre.

7.    Ejercicio: Del que sea y como sea. Cuando tu cuerpo está en movimiento, está excretando sustancias nocivas y ayudando en el proceso de “putrificación” del organismo y de la piel. Si el ejercicio produce sudor, mucho mejor; de lo contrario, opta por caminatas de por lo menos 20 minutos, un  paseo breve en bicicleta o bajar y subir escaleras durante un cuarto de hora.

8.    Comida fresca:
Aquellos que tienen cero o menos cantidad de aditivos son perfectos. Inclúyelos en todos tus platos del día: los alimentos con conservantes, como los enlatados, o con pesticidas y hormonas son fatales para la salud de nuestra piel, gracias a su alta cantidad de componentes químicos. Si puedes adquirir productos orgánicos como snack, mejor. Un alimento en mal estado es muy perjudicial.

9.    Fin de semana con mascarillas:
Una vez a la semana, preferiblemente el sábado o el domingo, días en los que no tengas carga de trabajo ni de estrés, realiza una mascarilla natural con frutas, leche, aloe y avena, todos elementos excelentes para nutrir y limpiar. Déjatela por 30 minutos y realiza el proceso en un ambiente relajado: cuando estás tensa o estresada, la piel tiene la misma reacción y no deja que los componentes penetren adecuadamente.

10.    Lávate la cara cada noche:
No importa qué tan cansada estés ni qué tan poco tiempo tengas. Quitar todas las impurezas acumuladas en el día es clave para mantener la piel joven. Acostarse con maquillaje o con polvo contaminante, es el peor error de todos.