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Cambia tu rutina

5 claves para divertirse en el trabajo

RevistaFucsia.com, 20/2/2012

Que tus jefes ni se atrevan a molestarte cuando quieras ponerle un toque de entretenimiento a tu vida laboral: expertos aseguran que hay un 50% más de productividad cuando se trabaja en un ambiente divertido y las labores se hacen de manera lúdica. 5 etapas que te llevarán del tedio al éxito, todo gracias al juego. Porque el trabajo ya dejó de ser sinónimo de esclavitud.

Foto: Thinkstock - Foto:

Te entendemos: las obligaciones de la vida hacen que muchas veces estemos estancados en un trabajo que no es del 100% de nuestro agrado o del que se apoderó la costumbre y el aburrimiento. Tu labor no te entretiene y está a un paso de convertirse en un sacrificio.  

Dicen que las personas que aman su trabajo  realmente no trabajan. Hemos asociado la palabra con el tedio y el “deber hacer”, 2 caminos seguros a la locura que usualmente dura de 8 de la mañana a 6 de la tarde.

 Y es que desde pequeños aprendimos que el juego y el trabajo son dos actividades contrarias. Como  diría el columnista Peter Gray,  “el trabajo es pesado, el juego es divertido. El trabajo es esencial, el juego es trivial. Pero cuando salimos de la escuela a continuar con el "mundo real", por lo menos algunos de nosotros, los afortunados, descubre que el trabajo no es lo opuesto del juego”.

Juega a tu manera

Para pasar de “bestias de carga” a una labor que saque lo mejor de nosotras, sigue estos simples consejos que harán de tu oficina un centro de diversiones en el que todos querrán participar.

1.      Desempéñate en lo mejor que sabes hacer: Si andas en plena etapa de búsqueda, este es el primer tip que debes tener en cuenta. Ser útiles no solo nos motiva sino que nos convierte en productivas y le da a nuestra autoestima aquel toque de superación y éxito. Encuentra una labor en la que puedas poner en práctica tus habilidades y talentos.

2.      Es cuestión de amor: Si por el contrario tus objetivos labores tomaron otro rumbo por cuestiones de destino (sobre todo, el destino monetario),  no te tortures desde un principio: hazte a la idea que estás adquiriendo experiencia, conociendo gente nueva, aprendiendo para que no cometas errores en tu próximo trabajo. El empleo es una distracción, ¿o prefieres quedarte en casa sin hacer nada? Mientras llega tu empleo soñado, requieres de un entrenamiento. Labora con amor, la clave para que un trabajo se convierta en un estilo de vida agradable.

3.      Sé creativa:
Incluso cuando no te lo piden. Si estás cumpliendo una tarea que no potencia al 100% tus capacidades o se ajusta a tus preferencias, ingéniatelas para fusionar tus gustos y habilidades dentro de tus quehaceres de oficina.  Juega libremente a lo que quieres: cuando propones ideas y éstas están a tu cargo, tú eres tu propia jefa y tienes la capacidad de “dirigir el juego”. Experimenta, improvisa, propone proyectos y aprovecha los tiempos muertos para crear cosas novedosas y entretenidas.

4.      Tu oficina = tu patio de juegos:
El juego es lo que elegimos hacer, no lo que nos toca. Convierte tu trabajo en la tarea más lúdica posible. Conversa con tus compañeros, date tiempo para reír, descansar y reinventar las labores que te son asignadas. Comparte con tus colegas, realicen actividades de integración, únete a las celebraciones de oficina y decora tu ambiente: personaliza el escritorio, lleva juguetes desestresantes, transpórtate hasta la empresa en bicicleta de vez en cuando y ve al gimnasio cuando se acabe tu jornada laboral. Aunque algunos  lo atribuyen como un elemento distractor, muchos menosprecian el poder de la música: un estudio demostró que la calidad de las actividades hechas es mejor cuando hay señales acústicas de por medio.

5.   El trabajo puede ser intrínsecamente motivado: De acuerdo con Gray, la actividad que se hace por diversión y no para un fin que lo produce es más gratificante y entretenida. El juego puede tener extremos, pero es el proceso de consecución de los fines, no los propios fines, por lo que es  más valorado. Es el proceso de sumar puntos o tratar de anotar es el que hace divertida tu labor.  En otras palabras, “jugar a las actividades en sí mismas son fuente de placer, cualquier producto que puede surgir es un efecto secundario”, según el escritor.