colores

Con buena energía

, 23/3/2010

Los colores sirven para estimular los sentidos, controlar la ansiedad, despertar la creatividad o calmar los nervios. Pon en práctica la teoría que así lo asegura.

Según los expertos, los colores tienen aspectos sicológicos y fisiológicos - Foto:

Las diversas tonalidades que nos rodean traen con ellas una energía particular. Esta es la razón por la que día a día escogemos nuestros atuendos por el estado de ánimo que nos rige o por la actitud que queremos proyectar.

Según los expertos, los colores tienen aspectos sicológicos y fisiológicos porque pueden producir cambios en un ambiente. Esto significa que la energía de un espacio puede ser estimulante, creativa, relajada o intensa dependiendo del color con el que haya sido decorado-conciente o inconcientemente-.

La teoría de la energía considera que hay dos tipos de colores los Yin y los Yan. Resulta que cada tono es una fuerza individual que se opone pero también se complementa con el otro, tal cual como explican los preceptos orientales las dualidades luz-oscuridad, calor-frío-, masculino-femenino, etc.

Los Yin: son los colores asociados a lo femenino, la tierra, la oscuridad, la absorción y la pasividad. Dentro de ellos se destacan:

• Naturales: son los tonos tierra como beige, crudo, madera y habano. Éstos, por estar ligados al elemento tierra, ayudan a estabilizar, consolidar y dar firmeza. Son ideales en espacios para el descanso como la habitación porque favorecen la calma y la tranquilidad. No obstante, cuando son usados en exceso, se tornan aburridos y monótonos por lo que no son los indicados para las zonas de trabajo, especialmente,creativo.
• Azules: sirven para decorar las oficinas o los dormitorios con demasiada luz natural porque invitan a la concentración. En demasía, conllevan al aislamiento, la soledad y la introversión por lo que no son aptos para habitaciones de clima frío, teatros o casas de personas con tendencias depresivas.
• Oscuros: el negro en la decoración refuerza la receptividad y la sensualidad de las parejas. No es aconsejable en espacios destinados para la salud, la comunicación o la diversión y descanso de los niños.
• Rosados: a la gama del color rosa se le atribuyen poderosos efectos relajantes. Favorecen la feminidad, la sensibilidad y el romanticismo. Por lo mismo no son recomendados para lugares de trabajo o estudio porque llevan a la ensoñación.

Los Yan: son los que describen los principios de lo masculino, el cielo, la luz, la penetración y la actividad. Los más importantes son:

• Rojo: concentra la energía vital transmitiendo excitación. Por esta razón es importante sólo usarlo en objetos pequeños porque cuando está en exceso distrae, incita a la violencia y estresa.
• Amarillo: es el color del optimismo, del sol y de la claridad. Sin embargo, algunos tonos pueden favorecer los estados de enfermedad y envejecimiento. La recomendación es preferirlo en el comedor porque promueve la unión familiar y no usarlo en las habitaciones de los bebés ni en las de los ancianos.
• Blanco: en general es apto para todos los espacios porque transmite limpieza y sofisticación. Lo importante es saber mezclarlo con los objetos para que los espacios no parezcan vacíos y frívolos.
• Verde: Se asocia a la inestabilidad y la inmadurez, razones por las que no es apto para las habitaciones de los adolescentes. Por su significado –crecimiento, expansión, rejuvenecimiento, es ideal para las zonas creativas de la casa.