Home /

Bienestar

/

Artículo

Actitudes

La dieta de una bruja: 7 tips de adentro hacia afuera

RevistaFucsia.com, 22/1/2012

Cuando optas por cambiar varios paradigmas morales y de trato con los demás para sentirte mejor y ser poderosa, estás pasando por lo que coloquialmente se conoce como el paso de niña buena a bruja. Pero ser malvada no es solo cuestión de actitud: también debes cuidar de lo que se alimenta tu estómago y tu alma.

Foto: Thinkstock - Foto:

Para ser una bruja hecha y derecha, es indispensable que des un giro de 180° a tus actitudes y, sobre todo, costumbres, aquellas donde reposa la comodidad y el temor por el cambio. Esta es la principal base para dejar de ser la niña dulce y buena que te impide avanzar, teoría propuesta por la escritora Ana Von Rebeur.

¿Qué hay de bueno en ser tan buena? Las ventajas de ser “mala” van desde dejar de ignorar tus deseos por pensar en los demás hasta estar en forma sin sacrificarte. Sigue el régimen alimenticio y de actitudes para vivir desde tu estómago las bondades de ser una “arpía”

Cuerpo

• 
Come lo que te dé la gana:
Además de pensar en cómo actuar para que los demás te acepten, ¿también debes preocuparte por cómo verte para agradar a tus amigos y pareja? La seguridad no nos la da un halago por nuestra figura sino qué tan bien nos sentimos (y lucimos) aquello que nos ponemos.

•   Fuera loza sucia:
La verdadera bruja, según Ana, no cocina como si se tratara de un trabajo pesado antes y después. Comer no tiene por qué darte mucho trabajo ni dejar torres de vajilla sucia detrás de ti. La bruja real  hace una dieta que le lleve minutos, no su vida entera. Si estás comiendo sola, prepara unos sanduches, ensaladas o frutas exóticas que ayudan a tu organismo.

•   Carnívora hasta los huesos: La mujer que es capaz de comer una carne ¾  y le pide al camarero que le traiga un filete casi sangrando, está transmitiendo un mensaje: “soy carnívora y no me importaría comérmelos vivos a ustedes también”. Llama la atención comiendo lo que mejor podemos comer: un cuadrúpedo.

•   Platos creativos y estimulantes:
Si por almuerzo o cena siempre tienes una caja de pizza, una hamburguesa o frituras con gaseosa, no solamente harás estragos con tu salud, sino que todos aquellos alimentos ricos en grasas menguan las energías de tu cuerpo y terminarás postrada en la cama o silla sin hacer nada productivo. Punto para las dietas ricas en verduras y proteínas.

•   Bruja sobria, vieja borracha: Mantente consciente de lo que haces y vas hacer. Esto te da un control sobre todo lo que pase alrededor, más si eres la única con los 5 sentidos. Si estás en una velada romántica o en una cena especial con alcohol de por medio, sorprende ordenando un vodka o cualquier trago fuerte, solo para impresionar. Nada de beberte el bar entero.

•   El domicilio, tu compañero perfecto: Cuando necesitas tiempo para ser lucrativa, ahorra y simplifica ordenando tu comida por domicilio. Una malvada inteligente recurre al delivery si tiene dinero, y si no, no se complicada la vida y prepara unos omelettes o  un batido de frutas y dedica su tiempo a la acción de vivir, más que a la de comer.

Mente
•   Paso firme y actitud de seguridad:
El miedo es el principal enemigo que detiene nuestro proceso de cambio. Miedo de estar solas, miedo de fracasar, miedo de equivocarnos, miedo de arriesgarnos demasiado. Hay algo clave: la actitud es mucho más importante que la aptitud. Si tú te dices de que las cosas irán bien, que no toleraras que te atropellen y que mereces lo mejor, no solo te convences a ti misma sino a los demás. Infundirás respeto y tendrás prioridad sobre otros. Como un bono extra, el positivismo, según estudios de inmunología, te da una mejor salud y te vuelve más resistente a enfermedades.

•   Deja de postergar las cosas: Haz lo que tienes que hacer, nada de aguas tibias o encontrar en el reloj la mejor excusa. Proponte y cumple la mayor cantidad de cosas posibles en un solo día: no hay mejor satisfacción que la de la vivir la cotidianidad sin que te aplaste. Prémiate por tus metas cumplidas y sigue incrementando las personales.

•   Ya lo pasado, pasado: Deja atrás lo que fuiste y enfócate en lo que eres hoy. Imagina cómo quieres verte a futuro y cómo quieres que te vean. Una vez tengas claro lo que anhelas, tu subconsciente trabajará en ello para conseguirlo.  El universo se unirá para que así sea, y no es cosa Vence la timidez, la vergüenza, la ansiedad y el miedo a lo nuevo. Debes reemplazar en tu cerebro todo aquello que disminuye tu coraje y te hace pensar las cosas más de 10 veces. Cambia la timidez por desfachatez y riesgo, la vergüenza por seguridad y confianza. Aventúrate en vez de pensar “qué podría pasar sí” y elimina de tajo la ansiedad que producen ese tipo de dudas.