El feminicidio constará como móvil de muerte violenta en 2015

Medicina Legal implementará un nuevo protocolo para identificar de forma más precisa y en detalle los casos en los que la muerte de las mujeres de forma violenta se enraíza en cuestiones de género. Es decir, por el simple hecho de ser mujer. 

Si bien el instituto introdujo desde 2012 el enfoque diferencial en el área clínica, esta es, la responsable de atender a las personas supervivientes de los fenómeno de violencia, hasta el momento, el instituto no contaba en el área de patología (encargada de las autopsias) con un protocolo de actuación que permitiese a los profesionales forenses contemplar que el fallecimiento de la víctima era debido a un feminicidio.

Como explica Martha Elena Pataquiva Wilches, coordinadora del Grupo Nacional de Clínica y Odontología Forense, Medicina Legal cuenta con manuales de abordaje general para las necropsias medico legales en casos en los que se sospeche alguna violación a los Derechos Humanos o infracción al derecho internacional humanitario; para atención de cadáveres que están en restos óseos; para víctimas fatales por proyectil de arma de fuego o por herida con arma cortopunzante o cuando se sospecha violencia sexual o torturas en las víctimas mortales. “Pero este protocolo es la primera aproximación a implementar un enfoque de género en el servicio de patología”.

La nueva herramienta se encuentra en su versión preliminar, y está todavía en proceso de ajuste y validación por pares. Se espera que comience a implementarse a mitad del próximo año. El documento también contempla la capacitación de los profesionales que participarán en el abordaje futuro de los casos de feminicidio.

A este respecto, la guía de necropsia incluirá recomendaciones específicas sobre los examenes internos y externos que deberán realizarse al cuerpo, muestras de laboratorios que no podrán dejar de hacerse, pruebas complementarias que deberán llevarse a cabo según el caso, así como el modo de articular la información que recaba la autoridad competente en la escena del crimen para poder establecer si se trata de un caso de feminicidio.

El documento incluye una clasificación del fenómeno, basada en la que propone el Consejo Académico de Naciones Unidas. Así, se contemplarán  los feminicidios producto de la violencia dentro de la pareja, motivados por crímenes de honor, relacionados con el crimen organizado, los dirigidos a mujeres en contexto de guerra o conflicto armado, el infanticidio femenino o feticidio femenino selectivo, el relacionado con la mutilación genital, el asesinato de mujeres acusadas de brujería o hechicería y el asesinato misógino de las mujeres.

“En la guía se explica cada uno de los tipos de feminicidio y se le da al médico forense los elementos para poder establecer si está ante un caso de muerte por feminicidio. Que el profesional se pronuncie y especifique que está ante un caso de femicidio  es diferente que diga que es una manera de muerte homicida. Eso es algo que no se está haciendo, es decir, en el documento que uno entrega cuando hace un informe pericial de necropsia nunca se habla de que eso se corresponde a un feminicidio”, indica Pataquiva.

El objetivo del instituto con esta medida es poder visibilizar el fenómeno de la violencia de género de la que son víctimas las mujeres y generar cambios en la política pública en materia de protección. “Estamos en una cultura con muchísimos estereotipos de género y con unos roles muy marcados en nuestra sociedad. Si uno se quedara callado desde la parte forense y no dijera estos fenómenos se están presentando no se lograría generar cambios en la política pública”, concluye.