Home /

Bienestar

/

Artículo

la 'tusa'

La tusa/traga eterna

, 23/11/2010

Has tenido alguien que te mueve el piso. Después de meses y más novios, nos enamoramos de nuevo si lo volvemos a ver. ¿Qué hacer para sacarlo de la cabeza?

Corazón roto, foto: Thinkstock - Foto:

Por RevistaFucsia.com

Sales de tu restaurante favorito con tu nueva cita. La cena fue entretenida, la conversación fluyó, la comida estuvo deliciosa y ¡sí¡, te reíste a carcajadas, lo cual es esencial para que alguien te empiece a gustar… puede haber futuro con este nuevo chico. Mientras él se encarga de pagar (igual tú estabas preparada para dividir la cuenta), miras de reojo hacia la puerta y por un momento se te para el corazón. La noche no podía ser tan perfecta. Ahí está, entrando con una morenaza de 1.80 metros, tu talón de Aquiles. Justo cuando te empezaba a gustar tu pareja esa noche, entra el hombre que te hace perder la cabeza, ese personaje que no superas, así pasen los años.

Te paras para irte, te agarras de gancho con tu chico, y agachas la cabeza. Estás a punto de salir cuando sientes un beso en el cachete. Es él… (Maldices para tus adentros pero en el fondo estás dichosa de verlo otra vez, y saber que fue él quien se acercó a saludar). ‘¿Te ibas a ir sin despedirte? No seas tan perdida, llámame en estos días y nos tomamos algo en mi casa, estoy estrenando apartamento, perro, cama y te vas a morir… ¡Compré una iguana!’. Después te susurra en el oído, ‘estás divina’. Y ahí fue, hasta ahí te llegó la dicha con el otro. Haces un esfuerzo por olvidarte de este incidente durante la noche pero es imposible… sólo esperas que llegue el otro fin de semana para llamar a Arturo, conocer su casa, su perro, su cama, su iguana (ay, como te gustan las iguanas, y él lo sabe… y sabes que por algo se compró ese bicho), y en fin… sabes que caíste otra vez. Pero más allá de la emoción de verlo nuevamente, lo que te hace feliz es la satisfacción de saber que aún piensa en ti, que tienes cierto poder sobre él después de tanto tiempo.

Esta euforia momentánea puede ser absolutamente irracional, si tienes en cuenta que estuviste llorando en silencio por casi 6 meses. Aunque eres una mujer del tipo extremadamente social y saliste a conocer más gente, lloraste sólo un par de veces por él, y nunca aceptaste estar ‘entusada’. Arturo, o como se llame, siempre estuvo en tu cabeza. Bajo el criterio de muchas personas, esa puede ser una tusa… una ‘tusa eterna’. En fin, te da vergüenza aceptarlo, y sólo lo lloraste una vez, cantando ‘What it takes’ de Aerosmith a grito herido, seguida de ‘Ese hombre’, de Rocío Jurado.

Entonces, ¿Qué hacer?
Debes ser consciente que tú eres quien debe manejar la situación, tú eres quien debe poner un fin a esta relación. La situación sería completamente diferente si ambos estuvieran en la misma posición, pero mientras tú te mueres cada vez que lo ves, para él tú eres simplemente un entretenimiento casual. Claramente estás en desventaja. El problema es que el tiempo pasa, y mientras esperas por él, las oportunidades de encontrar a otras personas van pasando. Y no creas que a él no le están llegando oportunidades, es muy probable que se esté enamorando de otra persona en este mismo momento. En un mes él se estará casando y tú habrás perdido tiempo valioso suspirando por él. Analizando la situación retrospectivamente, te das cuenta que las señales fueron siempre claras. Él jamás te tomó en serio, pero fuiste tú quien aceptó este tipo de relación. Puede ser que al principio tuvieron buenos momentos, pero ya es hora de avanzar y dejarlo ir.

Consejos a seguir para recuperarte de esa tusa
1. Llora por él la última vez. Nada es peor que guardarse las cosas para luego explotar cuando lo ves con alguien más. Tómate un día para recordar, llóralo y sácalo de tu sistema. Después de llorar seguramente quedarás lista para dormir. Al otro día te levantarás como nueva. Después de todo, llorar es terapéutico.
2. Deshazte de las cosas materiales que te acuerdan de él, cuando las ves parece como si esa persona estuviera aún contigo, y no es así. ¿Para qué guardar esa camiseta que te prestó después de que te quedaste todo un fin de semana en su casa?
3. Aprende a guardar los recuerdos, pero sin apego y nostalgia. Seguramente hay muchos buenos recuerdos que aún pueden hacerte sonreír. Sin embargo recuerda teniendo en cuenta que esta persona ya es parte del pasado, por lo menos en el plano sentimental.
4. Aprovecha para acercarte a tu familia. Ellos pueden ayudar a distraerte del dolor y son las personas con las que siempre puedes contar.
5. Habla de él con algún consejero, amigo o psicólogo. Son personas de confianza, quieren ayudar y pueden tener buenas herramientas para apoyarte en este proceso.
6. Ten conciencia de que no estás sola. Todo el mundo ha pasado por lo mismo y nadie se muere de amor.
7. Intenta aprender de la relación y alégrate de haber tenido esta experiencia. Después de todo, es mejor haber amado y perdido, que nunca haber amado.
8. Ayuda a otros. Te mantendrá activa y ocupará tu mente en otras cosas.
9. Enfócate en estudiar o trabajar más duro. Estudiar es una gran forma de ocupar la cabeza y adelantar trabajo. La satisfacción de tener buenas notas, y porque no, un ascenso en el plano profesional, pueden disipar por completo el dolor del despecho (y con ese aumento de sueldo por tu buen desempeño laboral, aprovecha para comprar esas botas que te harán ver divina para tu próxima cita).
10. Ten en cuenta que olvidar toma tiempo. Ve paso a paso, un día a la vez. Tu corazón necesita tiempo para sanar, pero al final siempre lo hace.
11. Por último, alégrate. Hay alguien más ahí afuera esperando por ti. No pierdas la oportunidad de conocer a otra persona y sentir mariposas nuevamente.