Personajes

Lobo.Rosa A pasos agigantados

, 15/4/2012

La joyera Mercedes Salazar y la estilista y consultora de moda Catalina Zuluaga le apuestan al diseño de calzado en una deliciosa mezcla de artesanía colombiana con las más sofisticadas técnicas zapateras.

Simón Flórez - Foto:

Para las dos la moda es una herramienta de expresión, de divertirse jugando cada mañana con diferentes colores, texturas y formas. Un estilo de vida. Cosas que hacen de su trabajo algo realmente alegre. Tanto, que Catalina recuerda que la película 101 Dalmatas la obsesionó de tal manera, que “cuando Cruella De Vil pintaba abrigos de piel, yo ponía pausa y trataba de copiar lo mismo. Ahí empecé a dibujar e imaginarme pintas sin parar. Desde ese momento supe que esto era lo mío”. Pero como no quería quedarse en el empirismo, se fue a estudiar el tema de la moda a fondo en Milán y París, donde además lo ejerció con marcas de la talla de Nina Ricci. Mercedes, por su parte, disfruta poniendo su conocimiento de joyería en piezas absolutamente actuales que llevan una alta carga de pasado, ancestro e historia, cosas que realmente la apasionan.

La amistad que las une, el gusto por las cosas únicas y una latente necesidad del mercado colombiano de zapatos con mucho valor agregado las llevó a crear Lobo.Rosa. Se trata de una marca de slippers, esos zapatos inspirados en las pantuflas o zapatillas “de estar en casa”, que hacen furor en el mundo, gracias a que son los favoritos de famosos como David Niven, el ganador del Óscar en 1958, quien los sacó a la calle; Brad Pitt, David Beckham, Jaime de Marichalar, Flavio Briatore, Lapo Elkann y muchos otros que han hecho de ellos un infaltable en sus armarios.

La diferencia de Lobo.Rosa con otras marcas radica en que con sus propuestas buscan recuperar las técnicas artesanales ancestrales y, según Mercedes Salazar, “los zapatos hechos a mano tienen un valor estético muy especial, le apostamos a recuperar el calzado de antaño, a volver a lo que usaban los campesinos, los indígenas y los caminantes de nuestras tierras”. Cada par de Lobo.Rosa es ciento por ciento hecho a mano en Colombia, pero de igual manera ciento por ciento global. “Son frescos y acertados en cuando a moda”, sostiene Catalina Zuluaga, quien agrega: “Estuvimos viajando por todo el país, fuimos a Cartago, Tipacoque, Guajira y Duitama, entre muchos otros lugares, en busca de técnicas y artesanos. los primeros slippers que se pondrán en el mercado tienen una alta presencia de tejidos, pero también se verán mucho yute y bordados”. Para estas dos colombianas, usar Lobo.Rosa es una invitación a “identificarse con la tierra que llevamos dentro, a vivir el ahora, porque es tiempo de abrazar, de cuidar la tierra, de ayudar…”, dicen contundentes.

La marca será presentada en sociedad el próximo 18 de abril en el restaurante El Techo, en Bogotá, donde además de moda para los pies se darán cita cientos de caminantes y soñadores que creen en el poder de su corazón y encuentran en cada día una aventura.