La responsabilidad de las pasarelas de nuevos talentos

Revista FUCSIA, 22/7/2014

El desfile de Cultura E, el proyecto de emprendedores de la alcaldía de Medellín, sirvió como ejemplo de lo que de verdad deben hacer las pasarelas de talentos jóvenes en una feria como Colombiamoda.

Pasarela Love Citizens.Foto: Cámara Lúcida - Foto:

Angélica Gallón S. 

Las pasarelas de jóvenes diseñadores que se presentan en una feria como Colombiamoda tienen no solo la responsabilidad de visibilizar los talentos emergentes sino que en la medida en que se convierten en plataformas de iniciación deben también hacer un acompañamiento y una curaduría juiciosa  para que esa experiencia sea provechosa para los diseñadores. Exponer en una pasarela antes de tiempo y sin el debido acompañamiento a un talento que tiene muchas potencias es correr el riesgo de quemar una verdadera oportunidad 

Por eso es importante resaltar las iniciativas que han sido exitosas en su afán de seguir fortaleciendo las nuevas generaciones de diseñadores locales. Ayer en las pasarelas de Colombiamoda tuvimos un claro ejemplo de manos de la pasarela Cultura E, un proyecto de la Alcaldía de Medellín que reconoció a tres creadores que mostraron unos proyectos maduros y susceptibles de ser sostenidos en el tiempo. 

Los diseños de Natalia Londoño, Love Citizens y Andrea Landa, mostraron que lejos de los acercamientos estrafalarios y poco comerciales con los que suelen vincularse a los jóvenes creadores, es posible ver sobre este tipo de pasarelas ejercicios serios, editados y muy bien construidos que de verdad hablan del futuro de la moda en Colombia. 

Natalia Londoño con su imperancia de blanco mostró una ropa complejamente construida, con chaquetas de cortes amplios y voluminosos, vestidos que rompen el equilibrio entre un lado y el otro y una superposición de capas que dejaron ver una impronta propia y una manera de entender la ropa de forma muy particular.


 Por su parte, Love Citicens hizo algo que parece imposible en un país tan lleno de propuestas de beachwear, sorprendió en la pasarela con unos diseños juguetones, llenos de referencias vintage, que evocan los wet suit de los 80 y que sobretodo proponen otras siluetas. La tan celebrada influencia deportiva se adueñó, de la mano de esta marca, de los vestidos de baño y salidas que casi hacen pensar en los bikinis como unas prendas exteriores para usar en otras ocasiones.  

Finalmente, la diseñadora paisa Andrea Landa que viene conquistando mujeres de todo el país con sus estola en macramé tejidas en cuero hizo finalmente su salto a la pasarelas y dejó claro por qué las concept store nacionales se pelean por tenerla en sus racks.  El cuero trabajado de forma artesanal es el protagonista de esta apuesta  que también alardea de unos estampados en tela creados por ella. Sobre la pasarela desfilaron así unas amazonas vestidas de cuero y chiffón. 

Al final, la ovación merecida para un proyecto que se toma en serio la formación de nuevos talentos.