Manual práctico para entender la moda en 8 preguntas

La Semana de la Moda de Nueva York, la Pasarela de París o los desfiles en Cibeles en Madrid nos suenan a eventos para expertos en la industria de la moda. Sin embargo, todo lo que allí vemos es lo que marca la tendencia de lo que usaremos la temporada del siguiente año. Pero, en un país tropical, ¿cómo adaptar esas tendencias basadas en estaciones? Catherine Villota, editora de moda, nos ayuda a resolver estas y otras preguntas.

1. ¿Cómo influye lo que presenta un diseñador en una pasarela, en nuestro clóset?

En la pasarela, el diseñador presenta su identidad de marca, más que exhibir un producto. Entonces es toda una historia contada a través de una colección. Y se traduce en la calle cuando la gente comienza a desmembrar esa colección y toma los colores, las siluetas, los materiales que coinciden en varias colecciones. Luego, cuando los editores de moda y las revistas especializadas las analizan, las acercan a la vida cotidiana.

Eso, finalmente pasa a las vitrinas y esa es la dinámica que comenzó en un desfile que se ve lejano, cuando la gente dice “nunca me lo pondría”, y es lo que luego compramos en las grandes cadenas de ropa o en las tiendas de diseñadores, que basaron sus creaciones en los estampados, las combinaciones, las texturas que vimos en pasarelas. Es un ciclo que comienza en los desfiles y llega al consumidor en las tendencias de las tiendas.

2. ¿Cómo estar a la vanguardia en las tendencias basadas en estaciones en un país tropical como el nuestro?

No podemos alejarnos de la tendencia mundial de Otoño-Invierno o Primavera-Verano, sino que la adaptamos a nuestro estilo, ritmo y clima. Por ejemplo, quienes vivimos en climas fríos no dejaremos de usar colores, estampados o texturas primaverales, pero en otro tipo de estructuras o materiales que no sean tan livianos y que se puedan usar en climas fríos. O en climas cálidos se pueden usar, por ejemplo, colores del invierno, prendas oversize, pero en una texturas livianas como el lino o el algodón.

3. Se dice que no hay nada bueno o malo en la moda. Pero, ¿cómo estar a la vanguardia, saber qué nos queda bien sin vernos simples o disfrazados?

Hay que buscar un equilibro. Armonizar lo que está de moda, mezclar prendas de tendencias con otras neutras que te ayuden a balancear. Llevar toda la tendencia encima es muy complicado y hay que ser muy sagaz. Para quienes quieren estar a la moda y no quieren ser extravagantes, la clave está en cruzar lo básico, lo clásico con tendencias. Por ejemplo, combinar lo formal y casual, la mezcla sutil siempre va a ser buena muestra de análisis de moda.

4. ¿Crees que estamos en un momento más arriesgado de la moda, transgrediendo normas?

Completamente. Ahora los límites son difusos. Por ejemplo, la tendencia deportiva que se metió en la vida cotidiana, en la que podemos usar tenis con prendas más casuales o formales. O elementos del mundo deportivo que se volvieron formales como las mangas olímpicas, o las sedas y terciopelos llevados a siluetas deportivas. Sí hay yuxtaposición de tendencias.

5. ¿Cómo ves al consumidor en Colombia en tendencias y cultura de moda?

Somos conservadores y seguidores, más que pioneros. Pero sí siento que en los últimos años la llegada de empresas que hablen de moda, que propongan tendencias hacen que la gente empiece a conocer, a informarse y lo vaya incorporando. Siento también que las nuevas generaciones son más fashion y tienen más conocimiento de la moda.
Hay muchos que no se arriesgan, pero es un proceso de aprendizaje. Las marcas están en competencia y ofrecen alternativas; porque tratamos de usar elementos homogéneos, pero hay un nicho que busca vanguardia y diferenciación, y si hay una persona que quiera usar algo diferente debería haber una oferta para que la moda de seguidores también se vuelva de pioneros.

6.  ¿Hay una brecha entre los consumidores y diseñadores?

Sí la hay. No solo en conocimiento, sino que el consumidor colombiano cree que las prendas de diseño son para ocasiones especiales y no para el día a día. Espacios como revistas y páginas especializadas en moda y la venta online hacen que la gente consuma más diseño.

7. ¿Aún hay miedo de comprar ropa por internet?

Cada vez menos. Es que estamos en proceso de aprendizaje y aún hay miedos. La moda en Colombia es el segundo ítem más comprado, así que se está comprando online, gracias también a redes sociales, pues son plataformas que fortalecen esta dinámica.

8. ¿Qué tendencias vienen para Otoño-Invierno?

En general, son 5.

1.Estampados con una mezcla espontánea. Desde flores con rayas, puntos con rayas, florales abstractos, tonalidades vibrantes, naranja, amarillo, verde, morado, magenta.

2. Blanco y negro: las máximas de los colores, pero en bloques, en figuras geométricas como pantalones por delante negro, por detrás blanco; en cuadros, líneas gruesas. Se trata de un nuevo minimalismo, menos básico.

3. La tendencia deportiva en la que sus prendas se hacen formales en siluetas y texturas. La idea es estar cómodos, pero con glamour.

4. Una línea irreverente llevada al lado más sofisticado en combinación de texturas, lana, encaje, cuero, seda, que tengan detalles, volumen y tridimensionalidad. Herrajes visibles, cremalleras, no tan punk. La inspiración son los años 80.

5.  Y también estampados de piezas exóticas, palmas, fauna y flora, selva y trópico.