El secreto mejor guardado de la isla

FUCSIA NOVIAS, 5/11/2014

Aparte de Punta Cana, República Dominicana guarda como un tesoro a Samaná, una región más virgen pero con igual número de playas cristalinas y paisajes de aventura, perfectos para disfrutar de la luna de miel.

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Al noreste de República Domi-nicana, la tierra de la bachata, el merengue y el béisbol, se encuentra la provincia de Samaná, un escondite en forma de península hecho para parejas que quieren disfrutar de un turismo más independiente, lejos de los hoteles del “todo incluido” y cercano a pequeños albergues con sellos de distinción.

Con cerca de 51.000 habitantes, mu-chos de ellos dedicados a actividades ecoturísticas, su oferta se mueve entre el carácter romántico que el propio paisaje puede dar. Por eso las cabalgatas son uno de los planes más frecuentes en este contraste del verde de sus lomas con el blanco de la arena de sus playas. Lo primero es bajarle el ritmo frenético de ciudad y dejarse atrapar por un compás más ameno, donde el baile bajo la luz de la luna, las caminatas cuando el sol cae, las piscinas naturales que permiten acariciar estrellas de mar y los viajes en catamarán son la constante de la aventura.

El recorrido por esta región permite observar sus casas típicas y coloridas al igual que caminos llenos de palmeras y cocoteros. Es obligatorio pasearse por Playa Rincón, una de las más bellas del mundo, y dejarse seducir por la naturaleza en estado puro.





v¿dónde hospedarse? Sublime Samaná: plagado de detalles, es un resort que ofrece relajación a sus visitantes, pues explora el descanso a través de los sentidos. Una deliciosa carta sumada a una playa tranquila de arena blanca, un canal extendido de varias piscinas, un spa rústico con distintos tratamientos exfoliantes y de humectación, son el escape completo a la rutina. The Peninsula House: considerado un hotel boutique, esta casa victoriana de seis habitaciones, ubicada a pocos minutos de una playa virgen, tiene la tranquilidad que toda pareja recién casada busca en su luna de miel. Cada plato es preparado según el gusto del comensal y sirven jugos recién exprimidos. Lujo y confort. v¿Qué ver? Parque Nacional Los Haitises: un recorrido en bote por una de las reservas de mangle más ricas del planeta permitirá explorar hermosos cayos donde se posan cientos de especies de aves como pelícanos, alcatraces y tijeretas. Hay una variedad de cuevas repletas de arte taíno, piscinas naturales, islotes, playas vírgenes como la de Cayo Levantado donde se observan ballenas jorobadas entre enero y marzo, y formaciones rocosas que han servido de paisaje en el rodaje de varias películas. La excursión es de un día y da la opción de almorzar platos típicos antes del regreso. El Salto El Limón: es uno de los atractivos turísticos de Samaná, considerado un monumento natural. La excursión se realiza por 4 comunidades que tienen 13 paradas ecoturísticas. El plan arranca a caballo alrededor de 45 minutos por paisajes naturales y protegidos, a través del sendero El Café; continúa con una caminata de 20 minutos, y termina con un baño refrescante en El Salto de 45 metros.Las playas: las Terrenas, las Galeras, Portillo, Cosón, Playa Rincón y Playa Bonita son los pasos obligados de este recorrido que aboga por el mar y el sol en cualquier hora del día y se acompaña de exquisitos pescados. Dependiendo del itinerario, se sumergirá en aguas cristalinas, algunas más tranquilas, otras aptas para la práctica del bodysurfing. v¿Cómo empacar? Como su clima es de bosque tropical húmedo y alcanza los 32 ºC entre noviembre y abril, lo mejor es llevar calzado cómodo y ropa ligera que incluya vestidos, bermudas, shorts y pantalones de telas delgadas. También son infaltables los vestidos de baño, el protector solar, los sombreros, el repelente, el protector de labios y las gafas de sol. Si va a realizar excursiones a caballo siempre es necesario un jean para cabalgar más cómodo y botas pantaneras, o en su defecto, un buen par de tenis. vRuta aéreaCon la apertura de la ruta directa Bogotá-Punta Cana, Copa Airlines completó 75 frecuencias semanales hacia República Dominicana a través del Hub de las Américas en Panamá, convirtiéndose así en la mejor opción para llegar a este destino desde Bogotá y las regiones del país. El vuelo a Santo Domingo opera vía Panamá desde ciudades como Bogotá, Cúcuta, Barranquilla, Bucaramanga, Cartagena, Pereira y San Andrés, cinco veces a la semana de lunes a domingo y cubre destinos como Punta Cana y Santiago de los Caballeros.