Profesión: Amo de Casa

Hace unas décadas, para las mujeres era un tabú y hasta un  motivo de burla el hecho de que sus parejas se encargaran de lleno de los oficios de la casa y de la crianza de los niños; para ellos era una completa ofensa: ¿Un hombre ‘amo de casa? ¡Jamás!

Sin embargo, y con el paso de los años,  la sociedad cambió y sus lineamientos también. Las mujeres, entre otras cosas, lograron que el machismo diera un paso al lado y ellas un paso al frente. La relación y la vida en familia se volvieron un asunto de dos y no un tema exclusivamente de género.

Es por esto que las housewifes – amas de casa- se convirtieron en  male housewifes y este término adquirió tanta popularidad que actualmente son todo un movimiento, que  tiene un lugar propio en las redes sociales y en la web, o los llamados grupos de apoyo, para compartir experiencias, dar y recibir consejos.

“Amos de casa a mucho honor” en Facebook, es uno de ellos, con más de 38 mil miembros activos. Y en Twitter esta comunidad no se queda atrás, “Amo de casa y qué?”  @AmoDeCasa_Y_Que  es otra cuenta en la que sus 480 seguidores comparten la misma condición.  En la web es posible encontrar páginas como AmosdeCasa.com, una red para todos aquellos que aman y disfrutan esta labor.

En la televisión también tiene su espacio, la serie Amo de Casa del Canal RCN (ver el primer capítulo )  se ha convertido en todo un fenómeno, siendo además la inspiración de estos hombres, quienes se sienten identificados con el protagonista, quien es despedido de su empleo y se ve obligado a dedicarse a las labores del hogar mientras su esposa trabaja.


Ser amo de casa Vs. Vida Sexual

 Un estudio publicado en American Sociological Review encontró que los hombres heterosexuales casados que se encargan de las cuentas del hogar y realizan tareas “exclusivas” para hombres, como cambiar el aceite del carro, tienen más sexo que los que se dedican a las labores de la casa.


Según el autor del estudio, Sabino Kornrich,  los hogares con una división de género más tradicional en el  trabajo tienen mayor cantidad de sexo que las que no.

“Para las parejas en las que el hombre no hacía las  tareas del hogar, la frecuencia sexual fue 4,8 veces por mes; para parejas en las que el hombre realizaba todas las labores de la casa, la frecuencia sexual fue 3,3 veces por mes”, aseguró a la revista BlackAmericaWeb.com.

Ser amo de casa, puede  ser una elección o una decisión. Sin embargo, con el cambio de era, la revolución feminista y la crisis económica mundial, más hombres se están uniendo a esta comunidad de los male housewifes, que cada vez adquiere más fuerza en las relaciones de pareja, a pesar de los prototipos sociales.