Sexo

Cuando la depresión apaga el deseo

LUISA TORRES, SEXÓLOGA, 27/10/2013

A sus 35 años, María convive con un hombre deprimido y no sabe cómo despertar su libido. Una condición que afecta la vida sexual de muchas parejas.

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La depresión es un trastorno del estado de ánimo, que se caracteriza por tener sentimientos de abatimiento, tristeza, infelicidad y culpabilidad. Es una condición que hace que el individuo pierda la capacidad para disfrutar la vida, pues todo lo observa y lo  vive bajo una nube gris, con sentimientos  y pensamientos negativos hacia sí mismo y hacia la vida, que hacen que la persona se aísle.  Esta dificultad puede llegar a afectar en un alto grado la relación de pareja, sobre todo en la vida sexual.

Cuando las personas sufren depresión, la vida sexual pasa a un plano diferente pues los pensamientos, el sentimiento de tristeza profunda y los medicamentos formulados por los especialistas son el coctel perfecto para el bajo deseo sexual. María, de 35 años, convive desde hace dos años con una pareja depresiva. A su novio no le dan ganas de tener relaciones sexuales y por otro lado los antidepresivos que toma, hacen que se le dificulte la erección. Ella comenta que es consiente del estado  depresivo en que se encuentra  su novio  y quiere ayudarlo y comprenderlo, pero esto no deja de afectar su  vida erótica. “Me cuesta mucho que mi novio no quiera ni acariciarme, ni tocarme”, comenta.

Muchas parejas viven esta situación y no saben cómo manejarla y comunicarla, por ello se distancian y empiezan  a tener dificultades en la relación. Si estás pasando por esta situación, te invito a buscar un terapeuta especializado que les ayude a expresar y comprender el problema.

En cuanto a la vida sexual, está claro y demostrado que los antidepresivos inhiben el deseo sexual, tanto en hombres como en mujeres. En los hombres producen una  disminución o pérdida total de la erección. En las mujeres, producen anorgasmia y sequedad vaginal. Sin embargo, esto no quiere decir que la vida sexual se haya acabado, pues el sexo no se limita solo a la penetración. Esta hace parte de las relaciones sexuales si se quiere o no.

La intimidad es un momento de conexión con la pareja, un tiempo único en donde se comparte,  se comunica y  se expresa  el amor, el respeto y el cuidado,
entre otras cosas, por medio del cuerpo, de las caricias, los besos y demás. La unión energética  que crea las  relaciones sexuales va mas allá de la penetración. Por esto es importante crear estos momentos íntimos.  Esta unión es la creadora de toda la magia y  la conexión emocional vital en la pareja.

La depresión es una condición compleja. Sin embargo, es importante mantener con la pareja encuentros amorosos y  momentos íntimos. De esta forma,  el amor  y la conexión creada  en los encuentros será la fuerza que apacigüe  los sentimientos de pena y provoque empatía y mas amor.