Sexo

La pornografía: ¿fantasía o manual de instrucciones?

Fucsia.co, 30/8/2013

Con el Internet, la pornografía está al alcance de todos y se ha vuelto un excelente recurso para darle rienda suelta a la imaginación. ¿Eres de las que pretende que una noche de sexo sea toda una prodcucción cinematográfica?

Foto: Archivo. - Foto:

Parece algo obvio que la pornografía no refleja lo que hombres y mujeres del común hacemos en nuestras habitaciones sin cámaras, luces y maquillaje. Aunque con el aumento de producciones de cine XXX y el fácil acceso gracias al Internet, las barreras entre realidad y ficción parecen estar desapareciendo en el imaginario de los espectadores.

Para acabar con las ideas erróneas que han creado estas películas (nunca va a llegar un plomero sexy a tu casa a darte el mejor sexo de tu vida), una creativa campaña ilustra algunos datos llamativos, como que “en la vida real, el 75 % de los hombres eyaculan en menos de tres minutos”. Tal vez por eso es que el “71 % de las mujeres no pueden tener orgasmos con la penetración”.

Además de explicar de una forma ingeniosa que el comportamiento sexual de las mujeres reales difiere del de las actrices porno – que siempre tienen orgasmos y aman los tríos -, el video invita a reflexionar sobre cuál es el vacío que nos vemos obligados a llenar con la industria del entretenimiento.

Jincey Lumpkin es una exabogada y fundadora de www.juicypinkbox.com, una página de Internet dedicada al estilo de vida lésbico. En entrevista con el HuffingtonPost, Lumpkin explica que la pornografía incluye “posar para la cámara”, la toma de ángulos “favorecedores” y cortar y pegar escenas que, hechas por gente común, “pueden quitarle la diversión y el placer” al sexo.

La actriz porno Nina Hartley, por otro lado, hace énfasis en el aspecto actoral de las películas para adultos. ”La pornografía es una interpretación profesional pagada hecha por actores. Es una fantasía y no se busca que sea una guía o regla general”, explica.

Video tomado de la cuenta de Youtube de KB Creative Lab.


“Esto muestra lo pobre que es la educación sexual en este país (EE. UU.) que la gente queda limitada a acudir a un medio de entretenimiento para informarse sobre su cuerpo”, afirma Hartley.

El poder de la información

“Los reto a que busquen en la página del Ministerio de Educación a ver qué hay sobre el tema y, con seguridad, no encontrarán casi nada”, le dijo a Semana.com el psiquiatra y sexólogo clínico Gabriel Montoya, y señaló que falta liderazgo por parte del Gobierno para formar campañas de educación sexual.

De hecho, la única campaña sexual que ha realizado el Estado en los últimos años es de la Procuraduría General de la Nación, un video de poco más de 30 segundos en el que solo se muestran parejas formadas por un hombre y una mujer y no aborda temas específicos de interés.


Video tomado de la cuenta de Youtube de La Silla Vacía.

Un estudio publicado en la revista especializada Plos One demostró que la educación sexual que hace énfasis en la abstinencia tiene una relación directamente proporcional al embarazo en adolescentes. Es decir que, entre más se refuerce este método, los jóvenes tendrán más relaciones sexuales sin protección.

A pesar de las falencias educativas en países desarrollados como EE. UU. y en el nuestro, el doctor Montoya considera que no todo está perdido y que la solución está en la familia. “La comunicación entre padre e hijo se pierde cuando se juzga al otro. La clave está en hablar las cosas con amor y con apertura para evitar un embarazo no deseado, una enfermedad sexual o cualquier trastorno psiquiátrico”, comentó.

Es por eso que hablar abiertamente de la sexualidad podría llevar a que tanto hombres como mujeres nos demos cuenta de que no estamos obligados a imitar lo que vemos en la pantalla. Fantasear es parte fundamental de la sexualidad, pero la realidad del sexo, si se desliga de la presión de verse o comportarse de cierta manera, puede ser aún mejor.