religión

Mi pareja tiene una religión diferente

, 29/5/2011

Si has decidido unir tu vida con una persona de una religión diferente, presta atención a estas indicaciones para que tengas un acoplamiento más tranquilo a nivel religioso con tu pareja y tu futura familia.

Mi pareja tiene una religión diferente, foto: Thinkstock - Foto:

Por RevistaFucsia.com
 
La ascendente secularización de las sociedades, el aumento del turismo a Colombia y el derecho a la libertad de culto, son condiciones que han incrementado la existencia de diferentes religiones en el país y la posibilidad de enamorarse de alguien que profese una religión diferente. Es posible que durante el noviazgo no haya mayor inconveniente, pero si se está pensando en matrimonio y en conformar una familia es mejor tener presente una buena manera para manejar la situación, según sea el caso.

Ninguno de los dos es practicante
En este escenario el tipo de rito matrimonial y las demás tradiciones no son realmente trascendentales, pero hay que tener cuidado porque por lo general las generaciones anteriores tienen la religión más arraigada y van a querer intervenir. Si ninguno de los dos es religioso puede hacer la vivencia en el hogar más fácil pero no hay que perder de vista la intervención de las familias en la influencia de la formación del hogar, sobre todo en el aspecto religioso; para tal fin es preciso investigar bien acerca de las creencias del otro y así poder tomar decisiones informadas antes de negarse a todo de entrada.

Uno de los dos es religioso
Si en tu caso la religión no es el aspecto más importante en tu vida, sino que prefieres adoptar los ritos tradicionales de tu pareja e incluso sus creencias, es importante que te informes bien acerca de tu rol dentro del matrimonio y el tipo de vida que asumirás en adelante, sólo así podrás tomar una decisión fundamentada.

Si tu pareja no es muy religiosa pero tú eres muy devota, debes ayudarle a tu novio a comprender a fondo en qué consiste la religión para que él pueda tomar el matrimonio como una cuestión seria y no como un ritual cualquiera; resuelve toda duda o inconformidad que él pueda sentir para facilitar su entendimiento.

Ambos son muy creyentes
En esta situación las diferencias pueden presentarse más a menudo, pero si ambos decidieron comprometerse en matrimonio, deben asumirlo como tal, con total madurez y respeto por el credo del otro. Después de leer acerca de la otra religión, ambos deben sentarse a conversar muy claramente acerca del rumbo que tomará el hogar, sobre todo porque los niños deben obtener una orientación lo más clara posible.

Para tener en cuenta
Conocimiento religioso:
es importante conocer los principios de la otra religión, para estar familiarizada y entender más a fondo las creencias e incluso los comportamientos de tu pareja y de su familia. Entrar en contacto con la religión del otro de la manera más respetuosa e interesada, te proporcionará el conocimiento necesario para decidir si quieres pertenecer a ese círculo. Puedes leer literatura relacionada e incluso participar en algunos ritos para lograr el entendimiento que necesitas para compartir con tu pareja.

Reservas mentales: el matrimonio es la representación de la entrega total a la otra persona, es un pacto de amor que ambos han decidido honrar, más vale expresar todas las dudas, inconformidades y solicitudes que hayan surgido durante el noviazgo antes de comenzar a formar una familia.

Separar la religión de los demás problemas: muchas parejas que profesan religiones diferentes culpan a la religión de los desacuerdos normales de pareja, pero no siempre el culto es el causante de las discrepancias. Es preciso determinar con claridad qué constituye un malentendido religioso y qué constituyen una pelea de pareja.

Formación de los hijos: la educación religiosa que van a recibir tus hijos debe ser discutida incluso antes de tenerlos, para evitar disgustos posteriores, pero sobre todo para evitar la confusión de los niños. Con respecto a la religión debe estar muy claro qué credo enseñar, si ambos son religiosos es importante que los niños conozcan ambos contextos para que más adelante puedan decidir con autonomía y claridad.

Respeto y honestidad: es importante que ambos respeten las creencias, cultos y ritos del otro, la burla puede ser muy hiriente cuando se involucra religión y amor; de igual manera, si surge alguna inconformidad, es fundamental manifestarla, aunque ello represente una posible discusión, es mejor aclarar las cosas cuanto antes y no esperar a que esa inconformidad comience a formar parte de discusiones posteriores.