El fundador de Foo Fighters y el baterista tenían una grandiosa relación.
El mundo de la música está de luto tras la noticia de que Taylor Hawkins, baterista de Foo Fighters, falleció. El músico de 50 años se unió a la legendaria banda de rock en 1997 y construyó una gran amistad con Dave Grohl, formador de Foo Fighters.
Antes de que Taylor se uniera a la banda, era el baterista de la cantante canadiense Alanis Morissette. Después de la gira del disco Jagged Little Pill, el cual sonaba por todas partes para la época de 1995, Taylor y Dave se conocieron. Lo hicieron en un programa de radio de Estados Unidos.
Taylor felicitó a Dave por el primer álbum de Foo Fighters, el cual también fue un éxito. Desde el primer momento que hablaron sintieron una gran conexión entre ambos. Tanto Taylor como Dave declararon que sintieron que eran “hermanos de otra madre”.
“Cuando nos conocimos, pensamos: ¡Somos hermanos de otra madre! Fue instantáneo, hasta el punto de que Alanis Morrisette me dijo: ‘¿Qué vas a hacer cuando Dave te pida que seas el batería de los Foo Fighters?’”, afirmó Taylor en una entrevista.
Y así fue, Dave le pidió que fuera el baterista de la banda y Taylor no dudó en aceptar la oferta. Desde ese momento surgió una de las amistades más icónicas del mundo del rock. Y es que ambos compartían experiencias tanto profesionales como personales. Además, la química entre los dos en el escenario era evidente en cada concierto que realizaban.
En agosto del 2001 el baterista de Foo Fighters tuvo una sobredosis de heroína, por lo que estuvo en coma durante dos semanas. Dave, angustiado por la situación de su compañero y gran amigo, decidió componerle una canción.
En un documental el fundador de Foo Fighters dijo: “No sé si Taylor lo sabe pero hay una canción en el disco acústico llamada On the mend, que escribí cuando estaba en coma por sobredosis. Es sobre Taylor, nunca le he dicho que habla de él. Para nada. Es una canción de amor para un buen amigo moribundo”.
La canción, que tiene una duración de 4 minutos, habla del miedo que sintió Dave de perder a su gran amigo Taylor. “Otra noche solo. No te preocupes, estoy bien. (...) Despiértame cuando llegue la hora. Despiértame con mi nombre. Te veo en algún sitio bajo la línea. Somos un espectáculo una vez más”.
Esta es la canción: