Ha enfocado su vocación y dotes musicales a las causas sociales y al impulso de jóvenes talentos.
Desde chiquita cantaba en el colegio donde estudiaba en Cali, su ciudad natal, aptitud que perfeccionó estudiando Técnica Vocal y Expresión Corporal.
Pero retomó su carrera hace cinco años dándole un enfoque diferente: “Dedico todos mis esfuerzos y recursos a causas sociales. Acabo de editar un Cd para una empresa del Valle del Cauca que lo regalará en diciembre a sus clientes, y lo que me pagarían por mi trabajo lo van a donar a una institución de ancianos.
Y en el transcurso de esta producción encontré talentos jóvenes a quienes me siento feliz de haberles dado trabajo, entre ellos, un grupo musical llamado Pico y Placa. También formo parte del equipo de la publicación ¿Entonces qué?, un proyecto de ayuda ciudadana”.