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Tips para ser feliz en el trabajo aunque no te guste

Fucsia, 7/7/2022

Como sentirse satisfecho y motivado en el sitio en el cual laboras

Ambiente laboral
Two men are looking at documents in a business meeting. Women can be seen in the background talking to someone else. - Foto: Hinterhaus Productions 2016

Muchas veces estamos trabajando en los sitios que menos esperamos o realizando labores que no nos satisfacen del todo, sin embargo, existen otras motivaciones que pueden hacer más agradable nuestro desarrollo laboral.

¿El trabajo no es lo que soñaste?

En varias ocasiones nos encontramos trabajando en áreas o sitios en los cuales no sentimos que estemos desarrollando nuestra verdadera vocación, sin embargo la felicidad que nos da un trabajo no debe venir de este en sí, sino que debe comenzar a trabajarse desde el interior de cada persona. “Cuanto más ponemos la felicidad en manos de algo exterior menos posibilidades tenemos de adueñarnos de ella” dice Alejandra Llamas, coach, fundadora del centro internacional de coaching Instituto MMK.

Y es que lo importante para cualquier persona es que su tiempo y dedicación tengan sentido, es decir algún valor de contribución para nosotros. Por eso, es bueno considerar otros aspectos además del vocacional, para convertir ese trabajo en una fuente de felicidad y de motivación. Por ejemplo, el sueldo, el horario, las vacaciones o el ambiente de trabajo.

Trabajo en equipo
Buscar motivación para obtener mejores resultados. | Foto: Copyright by Tom Werner

Hábitos para enamorarte de tu rutina laboral

Innovar y buscar retos. Lo primero es buscar focos de motivación en tu trabajo, retos diarios haciendo cosas nuevas. Esto es ir más allá de lo que dicen que hagas creando otras fases del trabajo que te hagan sentir mejor. No hay que estancarse haciendo lo mismo de forma rutinaria, sino aprender cosas nuevas o experimentar con otros puntos de vista, en pocas palabras, ser proactivo.

Llenar la vida de creatividad saliendo de la zona de confort. De esta forma se acostumbrará nuestro cerebro a buscar nuevas soluciones y a mirar las cosas desde otras perspectivas.

Proponerte metas a corto plazo. No dejar acumular cosas para el último momento, sino planificar las tareas. Cuando dejas que la pereza gane, se acumulan las tareas y siempre pensarás que necesitas invertir demasiado tiempo en tu trabajo. Alargar las cosas en el tiempo no hace más que posponer la acción.

Cuando la tarea sea muy larga subdivídela por etapas y piensa en tiempo real en cuanto tiempo la podrás llevar a cabo. A medida que vas finalizando cada subtarea, márcala como un éxito propio y sigue así hasta culminar la labor más grande.

Ayudar a los demás. No se trata de hacer grandes acciones, pero si es muy satisfactorio poder ayudar a los demás a llevar a cabo sus tareas, solucionando un problema en concreto. Plantéate por un momento a quien va dirigido tu negocio y qué problemas tiene. Si puedes resolver solo un problema de los que tenga tu público, tu trabajo ya habrá valido la pena.

Disfrutar de todo lo que haces. No es quedarse en la queja sino buscar la parte positiva de la tarea que se debe cumplir, para disfrutar de nuestro trabajo y sacar a la luz aquellas habilidades que poseemos.

Trabajar para vivir pero no vivir para trabajar. No olvides que tienes vida, entonces aprende a separar lo laboral de lo personal. De esta manera podrás mejorar notablemente tu calidad de vida.