Actitudes con las que estás saboteando tu relación

 
La novia dadivosa
Conoces algún caso de una mujer que le entrega su corazón y su vida a un novio por 4 años, acomoda sus hobbies y vida social para que concuerde con lo que a él le parece, no es posible encontrarla porque en sus tiempos libres siempre está ocupada haciendo lo que a él le gusta para tenerlo feliz. Pero, ¡oh sorpresa! Un día él le dice claramente que no está listo para el matrimonio o que ha pensado en no casarse nunca. Así que en algún momento terminan la relación y, a los 3 meses, él se casa con otra.

“Lo veo todo el tiempo”, confiesa Randi Gunther, PhD, consejero de pareja y autor del libro Relationship Saboteurs (Saboteadores de relaciones). “Las mujeres saben que tienen la capacidad de consolidar y cuidar a los hombres, y serán extremadamente generosas. El problema es cuando una mujer lo hace en contra de su pareja –como si fuera una mártir- y de repente el tipo se siente muy culpable y, aún peor, obligado.
 
A los hombres les gusta una mujer independiente, que tiene su propia agenda que no tiene nada que ver con él; a él le gusta que no es totalmente responsable de su felicidad”, afirmó el experto.

Si disfrutas ser una mujer generosa, es perfecto. Sólo recuerda que la persona más importante en tu vida eres tú, así que debes construir tu vida pensando primero en ti, en tus propósitos y tus preferencias. Si tienes construida una vida basada en los fuertes cimientos de tu individualidad, será más fácil erigir una relación de pareja saludable.

Comunicas demasiado
Con tantas redes sociales, facebook, twitter, whatsApp, RIM, y demás opciones, parece imposible no revelar múltiples detalles de la vida privada con el novio o el esposo, al menos indirectamente. Pero es posible que toda esa información te haga perder el encanto que otorga el misterio a una mujer.

Existe un dicho en inglés “familiarity breeds contempt” (la familiaridad cría desprecio), quiere decir que entre más conozcas a alguien o algo, más empiezas a encontrar fallas o cosas que te disgustan. Pero en esta era de la comunicación, la familiaridad tal vez genera algo peor: aburrimiento.

Permítete tener conocimientos, placeres y hobbies sólo para ti, de tal manera que el misterio no se pierda y sigas siendo interesante para tu pareja.

No te consideras bonita
¿Te cuesta aceptar los cumplidos que los demás hacen acerca de tu cuerpo?, ¿te pones nerviosa cada vez que él te abraza o pasa su mano por tu abdomen?, ¿odias que te vea la cola cuando pasas al baño? Ten cuidado, todos estos hábitos que revelan complejos pueden estar dañando tu relación de pareja más de lo que crees.

Si no te sientes sexy, no estarás interesada en tener sexo tampoco; o tal vez estés interesada en hacerlo únicamente con las luces apagadas o incluso con la ropa puesta.  Todas estas actitudes anti-sexy pueden resultar frustrantes para los hombres, al fin y al cabo ellos tomaron la decisión de estar únicamente contigo.

Para evitar que tus inseguridades comiencen a quebrantar la relación, deja de señalar las cosas que no te gustan de tu cuerpo ante tu chico, no querrás que él empiece a creerlas, ¿o sí? Ten en cuenta que, la mayoría de veces, es uno mismo quien se empieza a dar cuenta de los pequeños defectos, en vez de señalarlos a voces, haz lo posible por corregirlos.

Confundes las esperanzas con expectativas reales
¿Alguna vez te ha pasado que estás fantaseando con que tu novio te prepare una fiesta sorpresa de cumpleaños y luego, cuando solo te dio un regalito, te sentiste realmente decepcionada y te pusiste un poco brava?

No puedes establecer una relación siguiendo un guión, por más que desees que tu novio sea el de los fines de semana románticos y las serenatas en el aniversario, no lograrás que tus deseos se conviertan en realidad por arte de magia. Deja de indisponerte por que el novio de tu mente no es el real, y aprende a disfrutar de lo que tienes.