Este sí es

Para comprometerse con una persona no es suficiente dar el sí o llevar un anillo en la mano, es necesario aceptar que la perfección no existe y que una cosa muy diferente es casarse porque se está completamente segura y no hay toda una lista de cosas que se le quieren cambiar al novio, a acabar con la soltería porque así lo dicta la tradición o porque tus amigas ya lo hicieron hace mucho.

Lo mejor, si no se está del todo convencida –puede pasar que tu pareja te encante pero que no por eso te veas a su lado en el futuro– es analizar una serie de aspectos relevantes. De lo que se trata es de que descubras con qué tipo de comportamientos o ‘defectos’ de tu novio estarías dispuesta a convivir si tienes en cuenta que no porque se casen él los va a cambiar.

Te invitamos entonces a considerar con detenimiento cada uno de estos cinco aspectos:
1. Planes diferentes: cuando hablan de sus ideales de vida y de sus metas a largo plazo no hay planes en conjunto. También puede pasar que lo que cada uno sueña sea algo totalmente opuesto a lo que el otro desea, como por ejemplo tener hijos, vivir en la ciudad, viajar al exterior por una larga temporada otener un negocio propio. La respuesta que a este cuestionamiento des, puede servirte para medir qué tan dispuesta estarías a sacrificar tus intereses.
2. No te atrae del todo. Cuidado, porque una cosa es que la pasión no sea lo más importante en la relación y otra muy diferente es que no exista. Ten en cuenta que para un matrimonio es todo un reto mantener vivo el deseo sexual por lo que es determinante que cuando mires a tu pareja ésta te encante. Recuerda que más adelante pueden tener problemas de autoestima o de infidelidades si la situación se vuelve permanente.
3. La lista secreta. Nadie es perfecto, así que estás en una grave equivocación si piensas que luego de casarte vas a poder convertir a tu pareja en el hombre ideal. Ten presente que pocas veces ocurre que luego del matrimonio tu compañero deje de hablar como lo hace siempre, prefiera comer de otra manera, intente dejar sus malos hábitos o cambie sus rutinas. En este punto es indispensable que analices si alguna de las conductas de tu pareja te avergüenzan o te hacen sentir mal porque entonces, claramente, no sólo no debes casarte sino que además la relación no es sana para ti.
4. Como payasito. Si bien es cierto que a nadie le gusta que la persona con la que convive esté permanentemente llena de problemas, angustias o tristezas, también lo es que no siempre se puede estar feliz y que a veces es necesario desahogarse. Analiza entonces si tu pareja es esa persona con la que cuentas no sólo para reír sino también para llorar o para buscar apoyo cuando más lo necesitas. Si lo único que recibes son reproches o evasivas, tal vez debas aclarar algunos puntos importantes con tu compañero.
5. ¿Buen papá? Para muchas mujeres tener hijos es un anhelo por lo que cobra gran importancia estudiarsi para tu pareja también es un sueño convertirse en padre y si es capaz de asumir la responsabilidad tanto económica como emocional que implica la llegada de un bebé.

Ahora sí responde, ¿estás con el hombre ideal?