Consejos de una experta para engordar lo menos posible en Navidad

¿Cómo no engordar en la época navideña? Seamos realistas, no es nada fácil. Se vienen varios banquetes: novenas, Nochevieja, Año Nuevo, Reyes, todos inundados de natillas, buñuelos, panetón y champaña. Mucha champaña.

“Amiga, se vienen unos días duros” intenta decirte tu estómago. Y no le falta razón. Pero respira. Existen técnicas, fórmulas y trucos para no engordar - o engordar lo menos posible - durante esta época.

Pésate una o dos veces a la semana

Si lo que no quieres es que con el nuevo año lleguen nuevos kilos la clave está en el autocontrol. Empieza por conocer tu punto de partida, es decir tu peso actual o popularmente conocido como pre-buñuelos. De ahí lo que los expertos aconsejan es acudir a la báscula con mayor asiduidad que en otros periodos. Eso sí, ¡sin obsesionarse!, es sólo un mecanismo de seguimiento.

No te saltes ninguna comida

Eso de “compensar” saltándose el desayuno, el almuerzo o la cena no funciona. La clave está en el equilibrio y la mejor forma de mantenerlo es continuando con las rutinas habituales repartidas en cinco pequeñas comidas al día.

Planifica los menús

Aunque no se trata de llamar a tu tía Pilar y pedirle que en vez de su ya tradicional cerdo prepare algo más light, lo que sí puedes hacer es organizarte para evitar excesos. Es decir, si en la noche tienes una novena donde seguro habrá buñuelos, evita las frituras en las otras comidas del día. 

Juega con tu apetito

¿Alguna vez has ido al supermercado con hambre? Cuando organizas tus compras descubres cosas que de otra manera jamás hubieras comprado. Pues lo mismo sucede cuando llegas muerta del hambre a una cena. Por eso es importante jugar con tu apetito durante esta época. Consume un alimento rico en fibra, como una manzana o bebe agua antes de que sirvan la cena para que ya estés ligeramente saciada.

Come con consciencia

Claro, este consejo aplica para cualquier época del año, pero es clave para estas fechas en las que somos más permisivas. Comer siendo conscientes del hambre real que tenemos, de lo que estamos comiendo, o de si realmente sólo es por antojo, es la clave.

Controla tus copas

Porque no solo es la comida lo que engorda, de hecho el alcohol también juega un papel importante entre mantener tu línea o recibir el año con unos kilos de más. Lo mejor es optar por tragos que no tengan que ser combinados, medirse y tomar mucha agua.

¿Y lo light?…

¡Mentira! Todos los productos con la etiqueta light, igual engordan. Aunque sí es cierto que su porcentaje de calorías es menor, eso no quiere decir que no las tengan. Es decir, eso de natilla light ¡que va! La única forma de que no te engorde es no comiendosela.

“El buñuelo no engorda, el que engorda es uno” dicen por ahí, y sí. Ya sea en su presentación light o tradicional.

No te olvides de tu amigo el cardio

Seguramente estas de vacaciones o al menos tendrás días libres, por eso no tienes excusa. ¿Que está lloviendo? ¿Que estás feliz metida en tu cama? Pues sí. Pero piénsalo, una ida al gym y es como si esa tajada de panetón que te comiste a medianoche nunca hubiera pasado.

Lo cierto es que el ejercicio es una buena forma de canalizar la ansiedad y de recuperar el equilibrio: ya sea quemando lo que ya comimos o para poder permitirnos algún capricho, sin excesos, claro.

No olvides disfrutar, después de todo es la época más maravillosa del año solo no esperes un milagro navideño en tu báscula. Al final lo importante es darte gusto pero con cabeza.