Jaime González y Felipe González
En el tema de zapatos y carteras, Jaime y Nicolás González quieren romper el molde.
E n el tema de zapatos y carteras, Jaime y Nicolás González quieren romper el molde. Fue precisamente la monotonía en los diseños y vitrinas lo que los llevó a crear Sánangel, una marca propia en la que pudieran ser originales y llamativos sin caer en lo recargado y escandaloso.
Así, se alimentan en sus viajes y experiencias para darle vida propia a cada una de sus piezas. El mejor ejemplo es la colección que lanzan este mes. Se llama ‘Brodway’ y está inspirada en las luces y musicales que caracterizan a esta mítica avenida. “De ahí tomamos la carta de colores e iniciamos el desarrollo de las materias primas y los nuevos acabados para los cueros”.
Algunas de las ventajas de trabajar entre hermanos es que están acostumbrados a hacerlo en equipo. Los dos diseñan y también entre los dos elijen los colores y las hormas. “Siempre tenemos claro cuál es la mujer que usa nuestros productos y para ella diseñamos. La idealizamos, pensamos con qué ropa se podría poner cada uno de nuestros productos y en qué ocasiones los usaría”, dice Jaime.
Definen su marca como “sexy, pero recatada” y para ellos lo primordial es que sus zapatos o carteras llamen la atención. “Que cuando una mujer los use siempre alguien le pregunte dónde los compró”.
El éxito que han alcanzado se lo atribuyen a que lo que hacen les gusta. Por eso, investigan constantemente y aprecian mucho las recomendaciones bienintencionadas de la gente que los rodea. Sin embargo, ellos afirman que el toque secreto que hace a sus piezas únicas es que “cada producto tiene una magia extraña que se llama amor”.