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Phoebe Philo

, 19/4/2010

Desde su llegada hace dos temporadas, esta diseñadora inglesa se convirtió en un fenómeno que renovó la marca con todo el respeto a su espíritu francés.

Phoebe Philo - Foto:

Fulgurante en Céline
La nueva Casa de Phoebe Philo nació en Rue de Malte, de París, en 1945, de la mano de Céline Vipiana, una enamorada de la buena marroquinería y la alta moda. En sus principios estuvo dedicada a la creación de accesorios como zapatos, bolsos y maletas, con tanto éxito, que creció hasta convertirse en una de las marcas de referencia del lujo mundial. Gran parte de esa contundencia en la moda se debe a Michael Kors, que estuvo al frente de la dirección creativa desde 1997 hasta el 2004, cuando fue reemplazado por Roberto Menichetti e Ivana Omazic, hasta la llegada el año pasado de Philo. La creadora inglesa se reincorporó al mundo de la moda después de un retiro en el que se dedicó a la maternidad, tras haber reemplazado a Karl Lagerfeld y a Stella McCartney en la también francesa Casa Chloé, que desde su fundación, en 1952, no había tenido una renovación tan contundente. Su debut en Céline lo hizo con unos diseños de líneas muy marcadas, casi austeras, donde el corte fue el protagonista, que entusiasmaron a muchos, sentimiento que ella se encargó de capitalizar y reafirmar con su segunda colección de marzo pasado que, según Suzy Menkes, editora del International Herald Tribune, tuvo un éxito tan arrollador, que “gracias a Philo, la marca da un paso más en la cimentación de la firma francesa, por la particular elegancia urbana de la diseñadora que abre una nueva etapa en la marca y que poco a poco desprende una actitud más personal”.