¿Qué sucede cuando repites la misma ropa una y otra vez?

Uno de los debates que más apasiona en el mundo de la moda es sobre ponerse la misma prenda una y otra vez. Años atrás muchos consideraban que repetir ropa era algo cero cool, pero en la actualidad este pensamiento ha cambiado mucho. Hoy se habla de compra responsable y sensatez financiera sobre quienes han optado por reutilizar sus prendas en más de una ocasión.

Los expertos en moda coinciden en que cada prenda que uno elige en la mañana para salir a la oficina manda un mensaje al mundo. Aunque hay quienes gozan de armarios nutridos de ropa, siempre quieren más y diferentes prendas. El ciclo descrito es el de querer una prenda, llevarla a casa, esperar un tiempo y luego aburrirse de ella hasta desecharla. Unos optan por llevarla a un punto de reciclaje, otros la donan y otros sencillamente la venden. El destino final de la prenda es lo que menos interesa.

Cada elección tiene un motivo

Bien dicen por ahí que en la moda las elecciones no son “inocentes” y es que al hacer cualquier compra, el comprador, a fin de cuentas, termina haciendo parte del proceso de creación. Según los conocedores de la industria, comprar de manera tan seguida nos convierte en cómplices del fast fashion lo que “perpetúa un sistema explotador”.

Según la periodista especializada en comunicación de moda, Marta D. Riezu, “la moda rápida se obsesionó con brindarnos una oferta ingente y constante, con bajar y bajar los precios. “Democratizaremos el estilo”, prometían. Pero lo único que consiguieron es que cambiara nuestra percepción de la ropa, devaluándola hasta presentárnosla como desechable. Es una idea perversa: algo debe ser abandonado no porque ya no sea útil, sino porque ya no es tendencia, porque ya no tiene un valor social”.

Estas palabras fueron escritas en su más reciente columna de opinión. De acuerdo con Riezu, cada adquisición que se hace lleva a que los compradores entren en una especie de círculo. Pero afirma que hay una forma de salir de esa “rueda” y es comprando menos, mejor o dejando de comprar. También propone los intercambios de ropa, la reparación, el alquiler o repetir ropa muchas veces.

“¿Quién dice que lo nuevo tenga más valor? Hay prendas vintage que tienen mil veces más encanto que otras nuevas que nacen muertas, sin historia, sin ningún vínculo con su creador ni su lugar de origen”.

Cifras

Un estudio de Ellen MacArthur Foundation asegura que el uso de las prendas se ha reducido de manera drástica. En 2002 las prendas podrían ser utilizadas hasta 200 veces, pero en 2015 este número bajó a 50. Encuestas en Europa aseguran que las prendas alcanzan a tener una vida útil de 7 posturas pues se deforman luego de lavarlas. Según las cifras, en la actualidad se compra 60 % más ropa en comparación al 2000.