Moda

Cómo combinar los colores de tu ropa

RevistaFucsia.com, 13/3/2012

La mayoría de mujeres sufrimos con la pregunta inicial del día: ¿qué me pongo?, sumado a ésta, aparece una segunda inquietud, ¿será que esto me combina? A continuación encontrarás algunas recomendaciones que te harán más fácil la tarea de vestirte bien, y adicionalmente lograrás agregar vida y color a tu ropero.

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No importa si tenemos muchas o pocas prendas, la realidad es que muchas veces no sabemos cómo combinarlas, bien sea por mitos populares o porque simplemente no somos las más creativas a la hora de aplicar la teoría del color en nuestra indumentaria. ¿Pero cómo funciona en realidad  la combinación de los colores?

Los colores armónicos son aquellos que se ven bien juntos, es decir que logran un equilibrio entre sí. Son las combinaciones de colores que nos permiten obtener el efecto deseado para los sentidos y aunque en muchas ocasiones son subjetivas, existen algunas reglas universales.

Según Wikipedia, la vista humana contiene tres tipos de receptores llamados conos, que  responden  a los estímulos de longitudes de onda de  tres luces que son: rojo, verde y azul (básicos), de los cuales se derivan los tonos magenta, cyan y amarillo (más claros que los anteriores).

De la combinación de todos los anteriores se obtienen diferentes matices que van desde los tonos más sobrios hasta los más sicodélicos.

En esta temporada se imponen los tonos fuertes y básicos, dentro de los que se encuentran el amarillo, el naranja, el azul imperial, el fucsia, el magenta y el morado en todas sus gamas, que van desde chaquetas, pasando por pantalones y blusas, hasta los infaltables accesorios entre los que se destacan las carteras y zapatos.

Es importante tener en cuenta que por la brillantez de estos colores, lo mejor es cortarlos o contrastarlos con un color neutro que puede ser el clásico negro, el café o marrón, beige, blanco, gris o azul oscuro; también es importante tener en cuenta que debemos procurar no usar más de tres colores en un solo atuendo, pues el exceso de información le quita protagonismo a la  elegancia y sobriedad del conjunto de prendas.

Jugando con el color de la piel

Se distinguen básicamente tres tonalidades de piel, las blancas o claras, las intermedias o trigueñas y las oscuras o morenas; todas estas con pros y contras que deben tenerse en cuenta en el momento de elegir un outfit, pues así como una buena combinación logra resaltar cualidades, una mala elección puede lograr el efecto contrario.

Para las mujeres más blancas los colores brillantes como el rojo, el fuscia, el azul, el morado, el gris, el negro  y el azul oscuro  son excelentes complementos para su tono natural.

Las mujeres con tono de piel intermedio se ven beneficiadas con colores como el blanco, el beige, los dorados y tonos tierra, finalmente las morenas buscan tonos que contrasten y resalten su tono de piel, para ellas  son recomendables los tonos más brillantes como los amarillos, naranjas, verdes y las tonalidades claras como el beige y el blanco.

Color y diversión


Existen muchísimas posibilidades que podemos adaptar de acuerdo con nuestro gusto, estilo y la paleta de colores que tengamos en nuestro closet. Lo importante es arriesgarse,  pues podemos ser divertidas y creativas al momento de combinar, logrando darle un vuelco a nuestro estilo, añadiendo más color y alegría a la manera como nos ven los demás y teniendo en cuenta que hay colores que no solo nos favorecen por el tono de piel, sino también por la forma de nuestro cuerpo.

Los infaltables o neutros son aquellos colores que también son conocidos como colores “comodín”, pues son los que nos sacan de apuros cuando no sabemos cómo combinar, y a su vez se ven bien con todo, estos son el infaltable negro, el gris, el blanco, el azul oscuro y  el beige:

El blanco: Combina bien con todos los colores, especialmente con los oscuros, pues logra un mayor contraste, entre ellos encontramos el negro, el gris y el azul oscuro. Sin embargo, no hay que descartar otros colores como el azul, el verde, el fucsia y otros colores brillantes que al contrastar logran un excelente complemento.

Evita los colores muy claros para acompañar el blanco pues logran opacar la pureza de este color y volverlo aburrido, además si no tenemos una figura delgada puede ampliar visualmente el volumen de nuestro cuerpo. El blanco es un color muy propicio para ambientes tropicales.

El negro: Definitivamente el más elegante de todos, perfecto complemento de los colores claros como el beige y el blanco, perfecto para los tonos más brillantes como el rojo, el fucsia, el morado, y otros colores cálidos como el amarillo y el naranja, y discutido para otras combinaciones como el azul oscuro y el café, que resultan inadecuados para algunos gustos pero que vemos en muchos atuendos de las marcas más reconocidas. Se destaca por ser el color “adelgazante” por excelencia.

El azul oscuro: Contraste perfecto para tonos oscuros como el café y el gris, combina muy bien con colores como el blanco, el beige y con otros como el rosado, terracota, verde oliva y brillante. Es un color que por ser oscuro también nos ayuda a lucir más delgadas.

El gris: Es un color que también goza del privilegio de combinar casi con todo, combinan con colores claros tan bien como con los oscuros, complemento perfecto para el negro, el blanco, el beige, el azul, y otros  tonos como el morado y  el azul en todas su gamas, como el azul cobalto, añil imperial y aguamarina. Es un color que de acuerdo a su tonalidad puede favorecernos o desfavorecernos, cuanto más claro, mayor volumen.

El café o marrón: Ha sido estigmatizado y catalogado como un color difícil de combinar, sin embargo es más una cuestión de riesgo, generalmente este color se combina con colores de su propia gama, pero también combina perfectamente con tonos azules, rosados, verdes oliva y blancos;  dependiendo del gusto, como lo mencionamos anteriormente, también combina con el negro. Igual que el gris, puede adelgazar o volumizar de acuerdo a la tonalidad clara u oscura.

El azul: Es un color que combina con casi todos los colores, se ve  bien con los tonos neutros, y  con otros colores brillantes como  el morado, el rojo y el verde.

Amarillo: Un color difícil de combinar, como bien  dice el dicho “El que de amarillo se viste, a su belleza se atiene”, por su brillantez se recomienda utilizarlo con colores como el café, el azul oscuro y el negro, que contrastan maravillosamente con este tono.

No importa la combinación, lo importante es exaltar nuestras cualidades y que se adapte a nuestro estilo, cabe mencionar que lo mejor es evitar combinar los estampados, pero en caso de hacerlo, debemos neutralizarlos con colores que contrasten y destaquen estas figuras en lugar de sobrecargarlas.