Salud Sexual

Gimnasia sexual

Ana Saladén , 23/3/2012

Si bien no hay que hacerlo por deporte, el acto sexual es todo un ejercicio de alto rendimiento. Sin récords, ni gimnasia pasiva, ni por rutina, estos son los ejercicios a fondo para mejorar el desempeño.

Desde la excitación, en términos casi clínicos, el cuerpo libera hormonas, la circulación sanguínea aumenta tanto como la secreción de las glándulas sudoríparas, mientras,durante el acto, se van quemando entre 120 y 180 calorías, en promedio; y, cuando se llega al clímax, se sucede una serie de descargas de las células nerviosas del cerebro que provoca, luego, el relajamiento muscular y físico.

Pero más allá que una mera ejercitación, la relación sexual incluso es terapéutica y preventiva. En efecto, la Organización Mundial de la Salud ha acuñado el término de ‘salud sexual’ para darle mérito como un factor de bienestar y sanidad. Sus beneficios se cuentan por el efecto que, al igual que las prácticas deportivas y gimnásticas, se producen dentro del cuerpo. 

Por ejemplo, con el orgasmo se libera endorfina (responsable de la sensación de placer) con la que se relaja las paredes de venas y arterias facilitando la circulación y evitando el desgaste de los vasos. Así se podría justificar como prevención de la celulitis, causada por las mismas circunstancias, siempre y cuando se acompañe de una alimentación equilibrada y de ejercicio diario.

Calistenia, preparación física y pilates

Si bien tener relaciones sexuales puede resultar ser uno de los mejores ejercicios, como toda disciplina gimnástica o aeróbica, requiere de calistenia y de preparación física. O sea, también hay que realizar ejercicios de preparación para los encuentros sexuales.

En la lista de actividades que mejor van con el sexo están: caminar y tomar aire en la mañana, respirar profundamente entre cinco y diez minutos al día; ir la gimnasio, montar bicicleta; y en deportes, el tenis de dobles, mejor que el tenis individual, y nadar son los más recomendables. Cuando se practique estos deportes, descansar con frecuencia, beber mucha agua y utilizar el sentido común; si se siente que falta el aire, hay que disminuir el ritmo o interrumpir la actividad, para no terminar totalmente agotada.

Los técnicas de ejercitación con esferas de estabilidad, pilates, danza, yoga y chi–kung tienen mayores beneficios para la tonificación de las partes del cuerpo involucradas con la gimnasia sexual.

Los ejercicios pilates, por ejemplo, aumentan la circulación de la región pélvica. Más que una forma de ejercicio, pilates involucra cuerpo y mente. Cada ejercicio está diseñado para estirar y fortalecer los músculos involucrados, abriendo las articulaciones y liberando la tensión. La respiración se debe hacer de una forma específica en cada ejercicio para ayudar a dirigir la energía al área, mientras relaja el resto del cuerpo.  Por esta razón es que muchos encuentran una similitud con el yoga.

El principio básico de pilates es concientizar a la gente de su cuerpo como una unidad integrada mientras se mejora la postura y la respiración, y se incrementa la eficiencia en el movimiento. Para esto es indispensable hacer los ejercicios conscientemente, no basta con hacer repeticiones sin sentido. El objetivo es que la persona trabaje en el control inicial del centro del cuerpo o ‘centro de poder’ que se encuentra en el control de los abdominales profundos, la columna lumbar y la pelvis, buscando estabilizar el tronco para que de esta manera los movimientos sean más segurosy precisos, para restaurar el balance del cuerpo, influyendo así sobre la mecánica corporal y la postura.

La danza que prepara

La danza del vientre mejora el movimiento de caderas y pelvis. A propósito, con la danza samkya, “en la zona del cuerpo donde se encuentran los ovarios y el útero se realizan movimientos circulares, suaves y ondulantes que desbloquean las coyunturas y las articulaciones para liberar tensiones, lograr coordinación entre los dos hemisferios cerebrales y dejar fluir la sensualidad.

Esta terapia ayuda a vencer la vergüenza que tienen muchas mujeres de mover la cadera”, asegura Shamadyl una de las instructoras. Luego se trabaja el abdomen representado por el elemento agua bajo cuya influencia están los riñones y la vejiga.

Se realizan ‘olas’ utilizando el vientre para simular los movimiento del mar y después se ejercitan los brazos, símbolos del aire, con lo que se trabaja el aura. “Los brazos son como alas, como una prolongación del corazón y es ahí donde precisamente trabajamos ese órgano y los pulmones”. Finalmente, se atrae el elemento fuego que simboliza la cabeza y termina con un ejercicio de relajación para integrar la energía que se movió.

Yoga para el clímax

El yoga ayuda a tener una mejor respuesta sexual y aumenta la flexibilidad, ya que algunos ejercicios fortalecen el músculo pubicoccígeo y la columna. Estos ejercicios mejoran la circulación y la energía en esas estructuras. Para empezar, hay que acostarse y con los brazos a los costados, las rodillas dobladas y los pies apoyados en el suelo, se levanta la pelvis, apoyándose en la región superior de la espalda. Se mantiene la posición diez segundos y se vuelve a la posición original. Se repite diez veces.

Sexo sano 

Durante el orgasmo se libera la ocitocina, hormona que coayuda a equilibrar la serotonina y la dopamina, sustancias que se relacionan con el humor y la depresión. El hematólogo brasileño, Ricardo Manrique, encontró que el acto sexual previene la arterios clerosis debida al cúmulo de grasa en las paredes de los vasos por la mala circulación sanguínea. Como en una de sus pacientes la velocidad del flujo sanguíneo unos días se presentaba más lento que otros, se puso en la tarea de tabular la información y extra poló que los días en que la sangre fluía mejor, la paciente había mantenido relaciones la noche anterior. 

Conclusión:  el orgasmo disminuye las plaquetas (células responsables de la coagulación), lo que facilita la fluidez del torrente sanguíneo. Así, si descontamos que un dolor de cabeza es causado por la constricción de los vasos sanguíneos del cerebro, el sexo tendría el mismo efecto que una dosificación permanente de aspirina, y además no tendría contraindicaciones.