Conoce algunos de los procedimientos que pueden ayudar a sanar tu piel
El acné es una de las enfermedades de la piel más comunes y aunque generalmente aparece con los cambios de la adolescencia, existen otras causas que pueden provocar su aparición a cualquier edad.
Esta enfermedad se produce por la inflamación de las glándulas cebáceas y ocurre cuando los folículos pilosos se tapan con grasa y células cutáneas muertas. Se caracteriza por causar puntos blancos, puntos negros o granos.
En donde aparece el acné con mayor frecuencia es en el rostro, en la espalda y en el pecho y su tratamiento es aconsejable que se haga bajo la supervisión del dermatólogo, pues cada piel reacciona de manera diferente.
Según el nivel de agresividad de esta enfermedad es su tipología. Por ejemplo, si con frecuencia en la denominada zona T (nariz, frente y barbilla) encuentras pequeñas puntos o granos, puedes padecer de un acné leve.
Sin embargo, si te aparecen pústulas en la piel, puedes tener un acné medio-alto, el cual se trata de inflamaciones sobre la piel que tiene más frecuencia que el acné leve.
Cuando se trata del acné severo, se habla de inflamaciones en la piel mucho más agresivas que las dos anteriores y en la mayoría de los casos deja cicatrices, por lo que se aconseja que asistas al médico para evitar complicaciones.
Antes de tomar la decisión de iniciar un tratamiento médico, debes tener presente que el acné no se cura, sino que se controla, que empezarás a ver resultados entre 4 y 8 semanas después de haber iniciado dicho tratamiento, e incluso puede que el acné tenga un peor aspecto antes de mejorar.
No existe un tratamiento único para controlar el acné y si dado el caso las cremas y los antibióticos no te resultan o si no toleras sus efectos secundarios, podrías considerar tratamientos para el acné que se realizan en el consultorios médicos, bajo la supervisión de un especialista. Aquí te dejamos 3 opciones recomendadas por el sitio web middlesexhealth.org.
Fototerapia: el tipo de bacteria que produce el acné se puede eliminar al exponer la piel a diferentes tipos de luz. Antes del procedimiento, se aplica un medicamento en la piel para hacerla más sensible a la luz (fotosensibilizadores) y es posible que necesites de varias sesiones para ver los resultados.
Las inyecciones de esteroides se usa para los tipos de acné que causan bultos o quistes dolorosos debajo de la piel. Después de la infiltración con esteroides, el dolor disminuye, los bultos se aplanan y la piel puede mejorar en unos días.
Hay que tener en cuenta que esta es una solución temporal u ocasional para los quistes y nódulos rebeldes. No se utiliza para tratar el acné generalizado.
Drenaje y extracción: con el uso de instrumentos especiales para los tratamientos de la piel, el médico eliminará los quistes, las espinillas blancas y las espinillas negras. Esto mejora temporalmente el aspecto de tu piel, pero también puede dejar cicatrices.