La última colección de la firma colombiana elevó el vestuario diario con una puesta en escena que fusionó moda, música y arquitectura.
Colombiamoda 2025 vivió uno de sus momentos más poéticos y resonantes. Bajo el cielo de Medellín y en el emblemático Parque Biblioteca Belén, Punto Blanco presentó “Preludio Invisible”, una colección diseñada para convertir el acto de vestir en un ritual consciente de bienestar y presencia. Desde su regreso a la feria más importante de moda en Colombia, la marca propuso una narrativa estética profundamente emocional que trascendió el clásico concepto de desfile.
Inspirada en la tendencia global “corporate core”, la propuesta reinterpretó el vestuario corporativo con fluidez y libertad, mezclando looks íntimos, exteriores y deportivos en una secuencia visual armoniosa. La pasarela, que comenzó a las 9 p.m. alrededor del círculo blanco símbolo de la marca, se convirtió en un encuentro con la calma: prendas como pijamas y shorts fueron llevadas al primer plano del estilismo, combinadas con blazers, chalecos y pantalones wide leg elaborados en algodones, lino y tecnologías frescas para un resultado elegante a la vez funcional.
La puesta en escena fue tan relevante como la moda que se exhibió. En un entorno diseñado por el arquitecto Hiroshi Naito, donde el agua, los árboles y los espacios comunitarios dialogan naturalmente, se gestó un cortejo visual y sonoro único. Mientras la pasarela se desarrollaba, la Orquesta Filarmónica de Medellín interpretó en vivo composiciones originales creadas exclusivamente para la ocasión: unas piezas cinematográficas pensadas para evocar sensaciones de asombro y conexión emocional. El movimiento de los músicos, 65 intérpretes sobre el escenario, se sincronizó con la secuencia de salidas, reforzando la narrativa curatorial que buscaba un impacto emocional más que pasarelas aceleradas.
La estética minimalista de la colección reflejaba capas ligeras, fluidas y tonos neutros, creando una atmósfera de serenidad en transición. Sin embargo, la tecnología también tuvo su lugar: accesorios en impresión 3D con acabado perlado, inspirados en joyería futurista, completaron los estilismos como piezas conceptuales. Aunque no estarán a la venta, estos showpieces refrendan el deseo de la marca de innovar respetando su ADN de bienestar e integridad.
Con cerca de cincuenta looks en total, Preludio Invisible buscó mostrar que la marca es más que ropa interior: es una propuesta de vida consciente. Luz Eugenia Gallo, vicepresidenta de mercadeo de Crystal, afirmó que la colección “invita a vivir la integralidad de Punto Blanco al 100 %”, mezclando piezas de diferentes universos sin temor a romper reglas. El objetivo fue demostrar que vestir puede ser, al mismo tiempo, funcional, poético y emocionalmente significativo.
Carolina Rueda, vocera de la marca, comentó para Fucsia qué sensación querían dejar en el público: “¿Cómo podemos hacer que la gente salga diciendo que estuvo en algo increíble? Y se tomó la decisión de ir a la raíz. Punto Blanco es una marca que siempre está conectando con el arte, una marca que conecta con el universo de bienestar y la música es uno de esos caminos. Encontramos en la Filarmónica un aliado clave para lograr conectar con la emoción".
Esta narrativa estética también se traduce en un crecimiento estratégico. La marca, con 56 años en el mercado, busca consolidar su posicionamiento como una firma premium colombiana con proyección global. Próximamente abrirá nuevas tiendas en Bogotá y adelantó próximos lanzamientos, incluida una colaboración sorpresa para finales de año. Todo ello subraya su ambición de consolidar una identidad que va más allá de la moda comercial: es una invitación constante a habitar la calma y el confort con intención.
Este desfile no fue solo el regreso de Punto Blanco a Colombiamoda: fue una declaración que mezcla arte, diseño y propósito. Preludio Invisible demostró cómo una marca puede convertir lo cotidiano en espectáculo emocional, y cómo la moda puede ser un espacio de ritual, conexión y estética consciente que resuena más allá de la pasarela.