Migración, engaños y mujeres silenciadas: así es ‘El mito del sueño americano’, la nueva novela de Carmen Mirabal

En un momento donde las migraciones forzadas y la trata de personas se mantienen como tragedias invisibilizadas, la escritora y periodista puertorriqueña, Carmen Mirabal, irrumpe con una nueva obra literaria que busca despertar conciencia. Su novela, El mito del sueño americano, presentada en la última edición de la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo), retrata el drama humano de quienes cruzan fronteras con la esperanza de una vida mejor, pero solo encuentran abuso, explotación y silencio.

Con una narrativa íntima y poderosa, Mirabal plasma historias reales de migrantes latinoamericanos atrapados en redes de trata, trabajos forzados y violencia estructural en Estados Unidos. “Este libro nace de haber vivido en carne propia lo que significa ser una minoría en un país que presume libertad. Aunque yo soy ciudadana americana, también sufrí discriminación y vi de cerca cómo operaba el sistema para los indocumentados”, le contó la escritora a Fucsia.

La novela sigue a cuatro mujeres de distintas nacionalidades que se conocen durante su cruce hacia EE. UU. a través de Tijuana. Se prometen reencontrarse en Los Ángeles. Veinticinco años después logran esa reunión, marcadas por historias desgarradoras: prostitución forzada, esclavitud laboral, violencia sexual e incluso, la pérdida de sus hijos.

Historias reales detrás de El mito del sueño americano

La novela nace de relatos auténticos: mujeres vendidas para trata sexual, hombres obligados a trabajar para narcotraficantes, niños desaparecidos que terminan en redes de pornografía infantil. “Esas historias las escuché trabajando como periodista, pero también desde mi experiencia personal. El papá de mi hija tenía un negocio de limpieza doméstica con mujeres indocumentadas. Varias veces ‘la migra’ paró el bus donde las transportaban. Un día él tuvo que viajar, y yo quedé a cargo. Entonces viví ese miedo de cerca”.

Pero el libro no es solo el resultado de la observación: es también producto de una vivencia límite. Durante los años 80, Carmen aceptó infiltrarse, junto a un camarógrafo, en un grupo de migrantes indocumentados para un reportaje de investigación en televisión. “Dormíamos en el piso, con colchones sucios y cucarachas, nos bañábamos con una cubeta y comíamos una sola vez al día. A las mujeres nos trataban como mercancía. Nos iban a vender, y si los federales no hubiesen llegado, probablemente no estaríamos hablando hoy”.

Esa experiencia, que jamás salió al aire por decisión del canal (temiendo consecuencias legales), fue una herida que tardó décadas en sanar. “El reportaje se borró, literalmente. Pusieron las cintas en erase. Fue devastador. Me pregunté muchas veces por qué arriesgué mi vida. La respuesta llegó ahora: este libro es la historia que me prohibieron contar”.

Mirabal señala que lo más alarmante es la vigencia del problema: “Hoy, las mujeres son vendidas a mafias asiáticas como la yakuza. Los niños son secuestrados y usados en redes de pornografía. Todo eso sigue ocurriendo, incluso se ha intensificado. Muchos creen que exagero, pero solo hay que ver las noticias. Yo lo viví y lo investigué por años”.

Su objetivo con esta novela es claro: crear conciencia sobre la crudeza de la migración, desmantelar la fantasía del “sueño americano” y ofrecer una mirada honesta y urgente a quienes aún contemplan esa ruta como una salida.

“Lo que quiero con este libro es sensibilizar y visibilizar. A veces nos puede faltar trabajo o comida, pero estamos con nuestra gente. En Estados Unidos, si no pagas la renta, te ponen un candado en la puerta o te botan la ropa a la calle. Eso lo vi muchas veces como estudiante”, comentó Mirabal, haciendo referencia a su propia experiencia migratoria.

El objetivo de la novela: sensibilizar y desmitificar

En medio de su conversación con Fucsia, Carmen también se refirió al caso de una mujer pereirana que fue engañada con una oferta para bailar en EE. UU. y terminó esclavizada por la mafia japonesa. Este relato no hace parte del nuevo libro de la autora, pero sí fue un impulso para su publicación.

“Esa historia me impactó profundamente. Cuando la conocí tuve más motivos para escribir El mito del sueño americano, porque eso es lo que es: una mentira. Ese sueño ya no existe. Y sí, hay quienes dicen, ‘pero a fulano le fue bien’. Bueno, puede ser, pero hay que ver bajo qué condiciones. Y otra cosa que pasa frecuentemente: no comparen el caso de un famoso con el de una persona común que cruza la frontera sin saber qué le espera”, sumó Mirabal.

Si bien el engaño que vivió esta pereirana no forma parte del libro, su historia será llevada al cine en una película producida por la propia Carmen Mirabal. El filme busca visibilizar una realidad que, aunque parezca sacada de la ficción, sigue ocurriendo a diario. “Hay que hablarle a las mujeres, a los padres, a los hijos. Que estén alerta. Que no se dejen deslumbrar por promesas falsas. Y si mi obra puede salvar una sola vida, ya valió la pena”.

Reconocimientos y vida en Colombia

La autora, que lleva más de cinco décadas escribiendo y promoviendo la cultura latina, ha sido reconocida por instituciones como el Congreso de Colombia, el Senado y organizaciones como Corprensa y la Cámara de la Mujer en México. Este año, fue distinguida con el Premio Internacional de Literatura Rubén Darío por parte de su editorial española, Sial Pigmalión, convirtiéndose en la primera puertorriqueña en recibir dicho galardón.

Radicada en Colombia desde hace cinco años, Mirabal asegura que su vida ha encontrado en este país una segunda oportunidad. “Aquí me han abrazado, me han reconocido. Me preguntan por qué no vivo en EE. UU. siendo americana, y mi respuesta es simple: no se puede vivir con dignidad allá. El costo de vida es altísimo y los trabajos mal remunerados. Incluso los ciudadanos la tenemos difícil. ¿Imaginas los indocumentados?”.